La ambientación es un estilo llamado Dieselpunk, retrofuturismo en un universo alternativo deonde los coches de lujo son atómicos, hay robots mayordomos que levitan con una pequeña pila atómica y la electrónica es de válvulas de vacío super reducidas y optimizadas en vez de silicio. Que las leyes de la naturaleza son un poco distintas lo muestra la evolución de las cucarachas y la tasa de supervivientes tras haber caído al menos cinco nucleares en cada ciudad mediana de yanquilandia.
El contraste entre una ambientación basada en los años cincuenta, cuya imagen colectiva es de un periodo de inocencia y pureza en la sociedad y la realidad que se descubre a lo largo de los juegos sobre esa sociedad sólo utópica en la superficie pero profundamente inmoral y deforme en su esencia aumenta la sensación de repulasa y fascinación hacia ese universo. Creo que es parte de los efectos pretendidos, como por ejemplo los experimentos en las arcas, en los juegos narran auténticas barbaridades hechas con la población de los refugios como cobayas humanas. Algunos de ellos sí se han llevado a cabo en nuestra realidad, por cierto.
Voy por el segundo episodio y me estoy divirtiendo, la toma de las cortinas la noche de bodas es realmente divertida, y se ven caralladas por el estilo en estos dos episodios, a ver si siguen con las coñas absurdas, que en los juegos eran realmente divertidas.
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