Un umanista es lo que es este gran omvre. Pues no se le be el plumero...
PD: Por lo que respecta al Latín y a la cultura clásica mucho debe haber cambiado Yale para que ignaros y estultos como este menda integraran su cuadro docente. Tal vez en su nuevo cometido en la "otra hunibersidah" sea un heraldo de la globalización que busca arrasar con todo lo que no sea un productor-consumidor acrítico muy próximo a la indefensión por la vía del analfabetismo y, obviamente, la cultura es un obstaculo para alcanzar ese objetivo.
Reparen en este extracto:
El estudio del latín es capaz de aportar notables beneficios a la cultura científico-técnica y al ámbito empresarial.
Leopoldo Sedar Senghor en su libro Libertad, Negritud y Humanismo recuerda que durante una estancia suya en los Estados Unidos visitó la Universidad de
Harvard, que es conceptuada, juntamente con la de
Yale, una de las más famosas de ese país.
Se le ocurrió preguntar si se seguía concediendo un lugar preponderante al estudio de las lenguas clásicas. “Claro que sí -le respondieron-; pues ha alcanzado una importancia extraordinaria desde la Segunda Guerra Mundial”. Y le explicaron el fenómeno de esta manera:
“Los business, que son gentes prácticas, descubrieron que los hombres en posesión de una cultura greco-latina triunfaban mejor en los negocios” (Vaccaro, 1989).
En los países más industrializados, el mercado requiere especializaciones de tipo técnico con tal insistencia que cualquier otra preparación de tipo humanístico parece un lujo, si no directamente algo inútil. Entre las especializaciones figura alguna tan curiosa como esta, que existe en
Alemania: “Licenciatura (o doctorado) en elaboración de la cerveza”. Sin embargo,
la tesis que hoy prevalece también en las industrias con altísimo contenido técnico y científico, es que para sostén de la tecnología nada hay más útil que los estudios clásicos.
Con respecto a Italia, podemos señalar unos datos interesantes. En el Encuentro sobre el valor del latín que tuvo lugar en Siena en 1989, y cuyo sponsor fue
el empresario Carlo De Benedetti, este
sostuvo que el latín y cultura humanística “es un arma para formar nuevos gerentes, seguramente superiores a los de los Estados Unidos”. Y añadió: “En la Olivetti hay un 15 % de graduados en materias humanísticas” (Straniero, 1989).
En otro Encuentro organizado, hace alrededor de una década, en el
Politécnico de Milán y cuyo tema fue: “Escuela y trabajo”, la postura que prevaleció fue esta:
“En los últimos años nos hemos ido convenciendo cada vez más de que una preparación con un sólido fundamento humanista es muy funcional para la inserción en la industria tanto del personal como de los directivos”. En dicho Instituto, que es el templo de la alta tecnología italiana en la
Facultad de Ingeniería, considerada una de las más prestigiosas escuel'as del mundo, l
os docentes están convencidos de que un joven que tenga una buena preparación de tipo humanístico se inserta de manera excelente 'también en los estudios de la más calificada tecnología.
A este mismo propósito, el Prof.
Carlo Ortolani, docente de Teoría y Técnica de la Combustión en aquella Facultad de Ingenieria, y autor de una publicación sobre el tema “Estudios clásicos y 'tecnología”, nos dice:
“La proveniencia del liceo clásico y científico es garantía de los mejores graduados. Enseñar y aprender cuestiones técnicas es casi banal. No se trata de preparar paquetes de tablas, resultados, diagramas. Lo que cuenta es la capacidad de pensar a un nivel superior, es decir, de analizar estos resultados, tablas y diagramas. En suma , antes que la técnica hay una forma mentis que importa. No es determinante la cantidad de las nociones técnicas, sino la facultad de organizar lo que se aprende. Tengo la impresión de que esta facultad el estudiante o la tenía antes de llegar al Politécnico o no la aprende más. Por otra parte, en una empresa lo que uno no sabe se lo enseñan. Pero si no sabe razonar, no hay nada que hacer” (ib.).
Se está advirtiendo que las empresas empiezan a valorar en sus ejecutivos la formación humanista y el manejo del latín. En un reciente Congreso que la Unión Latina organizó en Roma se oyó decir: “
Los que buscan y seleccionan cazatalentos para dirigentes de empresas ponen sus ojos preferentemente en gente que se haya preparado en humanidades. Si el humanista ha estudiado a fondo el latín, posee un talento aún mayor” (Schuchner, 1991).
Luis Ruiz Arcaute, presidente ejecutivo de Korn Ferry de España, expresó:
“Un técnico, sólo técnico, un ingeniero suelen ser una pena. Ven el mundo sólo por un agujero cuando hoy es necesaria una gran visión global de los problemas, capacidad de planificar, intuición de futuro”.
Philippe Rosillon, secretario de esa Unión Latina, no titubeó en decir que “
quien conoce el latín posee en su formación un rigor mental que no sólo es humanístico, sino también y curiosamente, científico” (ib.).
http://www.juan23.edu.ar/institucional/rector/publicaciones/pdf/Latin_Hoy.pdf
PD": No encuentro ahora la referencia pero hace tiempo leí que también en el Reino Unido se impartía el Latín en escuelas de ingeniería.