Ése es el enemigo y ésos son los traidores.
¿Dónde están los traidores?. En la administración.
Más claro que el caldo de un asilo.
Ni de coña me quitan a mí una multa aunque sea de aparcamiento, man que page yo la merienda a los guardias.
Yo hubiese denunciado a esos me gusta la fruta por coacciones
¿Con los jueces conchabados o coaccionados?.
Amos no aguante.
No sé si saldrá usté multado, pero fijo que emplazado para otro juicio.
Y otro
y otro
sí.
Menuda picadora de carne.
Los de las togas también son funcionarios como las de los pelos fritos que adoctrinan a niños de mocos. Algunos se las manchan con el polvo del camino (sic Conde Pumpido) y otros vaya usté a saber por qué clase de andurriales arrastarán las togas.
Miedo me da a mí la independencia del poder judicial ése.
Son las instituciones las que se han ido todas al guano. Desde la sanidad a la educación, desde la seguridad a las obras publicas.
La gente, cada vez menos, aún tiene a la familia. Pero de las instituciones no espere usté nada.
De la administración y del mulo cuanto más lejos más seguro
y todos preferimos que la coz sea del mulo y no de la administración.
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