Vox solo sobrevivirá a largo plazo si se enroca radical y furiosamente en la defensa de los valores que le hacen diferente a PP y Cs. Es decir: cero tolerancia con genaro, inmi gración y feminazismo. Y si eso implica que gobierne la izquierda en Madrid y Murcia, y ver el mundo arder, pues se asume y se explica en rueda de prensa. Y el electorado les recompensará en próximas elecciones, no me cabe duda.
Todo lo que se aleje de eso, en concreto la tibieza lamentable que se está mostrando ante la opinión pública cediendo ante los otros miembros del trifachito, desinfla la ilusión y les hace perder apoyos.
Ceder un centímetro es la muerte de Vox.
Si no, mirad en qué ha poco equilibrado el pacto a tres de Andalucía: en un circo mediático donde PP y Cs sacan pecho por sus incipientes logros y se atribuyen constantemente las medallas, y donde Vox hace el papel de augusto gruñón que ameniza la velada y mueve a la risa con sus ocasionales salidas de banco y meteduras de pata. Y mientras tanto, en esa CCAA los profesores progres siguen adoctrinando, las pateras siguen llegando, las subvenciones a chiringuitos feministas radicales se siguen pagando puntualmente.