Chapinazo
Exiliado
Hola:
Yo vivo en Guatemala y tengo un contrato con una empresa de aquí que me paga neto entre 6,000 y 7,000 USD al mes (12 pagas). Hay una parte pequeña que es variable, pero de media vienen a ser 6,500 USD. Además tengo coche de empresa y seguro médico. Es muy buen sueldo, aunque entre profesionales (buenos) aquí, nada excepcional en absoluto.
Bien. Una empresa española que es cliente de mi empresa y conoce bien lo que hago, y al parecer lo valora, me está tentando para que vuelva a España para trabajar con ellos (residencia en Madrid). No me han llegado a ofrecer nada, sino que me han dicho que lo piense y que les haga una propuesta.
Me apetece volver a Madrid porque ahí están mi familia y mi infancia, me gustan los vinos, las tapas y el modo de vida, aunque haya muchas cosas que me gustan más aquí que allí (educación de la gente, paisajes, folleteo, viajes, dinamismo en todos los sentidos...). Pero bueno, que me apetece volver: llevo cerca de tres años aquí.
Pero me pongo a hacer cuentas y se me pone la carne de gallina. Para tener lo mismo que cobro aquí (sin ninguna mejora), unos 6,000 EUR netos (12 pagas) tendría que cobrar bruto en España la friolera de 123,000 EUR al año, porque solo en IRPF me aplicarían un 35.3% (según mis cuentas en base a tramos de IRPF) y mi parte de Seguros Sociales. Con los costes laborales a la empresa se le pondría la broma en unos 140,000 EUR al año. Yo no creo que valga tanto, la verdad.
Todo esto sin hablar del coche de empresa (que en España tributaría) y de que el consumo está penalizado con el 21% de IVA, más alto que en ningún otro país en el que yo haya estado. Y las multas, porque cuando vivía en España pagaba de media al año 400 EUR de multas (y conduzco como una maruja, aunque eso sí, hago muchísimos km)
En este país, por hacer lo mismo y ganar lo mismo, cuesto a la empresa del orden de 85,000 USD al año (incluyendo retenciones e impuestos). En España, 140,000 EUR al año. Hay unos 60,000 EUR que se queda el estado de España en impuestos directos (y en indirectos no quiero ni pensarlo).
Y los servicios que ofrece España no son una maravilla ni me interesan mucho más que los que ofrece Guatemala. No voy a tener pensión digna de tal nombre (ni nadie de mi edad la tendrá). No uso aeropuertos en mitad de la nada, ni paguitas, ni ayuditas, ni trenes a sitios absurdos, ni me dieron nada cuando rescataron a los bancos, ni me interesan los observatorios del flamenco. Y los poco servicios que sí usaba me lo cobraban bien caros. Los únicos servicios que uso y que son mejor en España son claramente las carreteras y la seguridad pública. Puedo pagar algo por ellos, pero ¿tanto?
Como conclusión. Volver a España está muy complicado si uno viene de un país con una fiscalidad baja (como la que había antes en todas partes, vamos). En España yo creo que ha pasado como la historia de la rana en la cazuela. Si el calor va a pocos, no se nota y cuando te das cuenta estás ya cocido. Pero si te echan de golpe a la cazuela saltas porque es insoportable.
España es un infierno fiscal en todos los sentidos posibles. Y me temo que por eso mismo va a languidecer durante décadas hasta convertirse en algo insignificante. Y me da pena el país. Y me da pena no poder volver, porque a robar, a los caminos.
Yo vivo en Guatemala y tengo un contrato con una empresa de aquí que me paga neto entre 6,000 y 7,000 USD al mes (12 pagas). Hay una parte pequeña que es variable, pero de media vienen a ser 6,500 USD. Además tengo coche de empresa y seguro médico. Es muy buen sueldo, aunque entre profesionales (buenos) aquí, nada excepcional en absoluto.
Bien. Una empresa española que es cliente de mi empresa y conoce bien lo que hago, y al parecer lo valora, me está tentando para que vuelva a España para trabajar con ellos (residencia en Madrid). No me han llegado a ofrecer nada, sino que me han dicho que lo piense y que les haga una propuesta.
Me apetece volver a Madrid porque ahí están mi familia y mi infancia, me gustan los vinos, las tapas y el modo de vida, aunque haya muchas cosas que me gustan más aquí que allí (educación de la gente, paisajes, folleteo, viajes, dinamismo en todos los sentidos...). Pero bueno, que me apetece volver: llevo cerca de tres años aquí.
Pero me pongo a hacer cuentas y se me pone la carne de gallina. Para tener lo mismo que cobro aquí (sin ninguna mejora), unos 6,000 EUR netos (12 pagas) tendría que cobrar bruto en España la friolera de 123,000 EUR al año, porque solo en IRPF me aplicarían un 35.3% (según mis cuentas en base a tramos de IRPF) y mi parte de Seguros Sociales. Con los costes laborales a la empresa se le pondría la broma en unos 140,000 EUR al año. Yo no creo que valga tanto, la verdad.
Todo esto sin hablar del coche de empresa (que en España tributaría) y de que el consumo está penalizado con el 21% de IVA, más alto que en ningún otro país en el que yo haya estado. Y las multas, porque cuando vivía en España pagaba de media al año 400 EUR de multas (y conduzco como una maruja, aunque eso sí, hago muchísimos km)
En este país, por hacer lo mismo y ganar lo mismo, cuesto a la empresa del orden de 85,000 USD al año (incluyendo retenciones e impuestos). En España, 140,000 EUR al año. Hay unos 60,000 EUR que se queda el estado de España en impuestos directos (y en indirectos no quiero ni pensarlo).
Y los servicios que ofrece España no son una maravilla ni me interesan mucho más que los que ofrece Guatemala. No voy a tener pensión digna de tal nombre (ni nadie de mi edad la tendrá). No uso aeropuertos en mitad de la nada, ni paguitas, ni ayuditas, ni trenes a sitios absurdos, ni me dieron nada cuando rescataron a los bancos, ni me interesan los observatorios del flamenco. Y los poco servicios que sí usaba me lo cobraban bien caros. Los únicos servicios que uso y que son mejor en España son claramente las carreteras y la seguridad pública. Puedo pagar algo por ellos, pero ¿tanto?
Como conclusión. Volver a España está muy complicado si uno viene de un país con una fiscalidad baja (como la que había antes en todas partes, vamos). En España yo creo que ha pasado como la historia de la rana en la cazuela. Si el calor va a pocos, no se nota y cuando te das cuenta estás ya cocido. Pero si te echan de golpe a la cazuela saltas porque es insoportable.
España es un infierno fiscal en todos los sentidos posibles. Y me temo que por eso mismo va a languidecer durante décadas hasta convertirse en algo insignificante. Y me da pena el país. Y me da pena no poder volver, porque a robar, a los caminos.
