Me arriesgaré a poner mi opinión aquí, esperando no ser linchado. Yo me pregunto en serio ¿Quién, quienes deciden cuales son las formas que se proyectan en la pared de la caverna, quiénes deciden sobre qué se echa y luz sobre qué, sombra? ¿Quiénes escriben el guión de lo que pasa en España? Los MEDIOS DE COMUNICACIÓN.
Y aquí tenemos uno de esos casos donde le pueblo zombificado baila al ritmo que le marcan los medios. Y ves a todo el mundo en Facebook (pero todos es TODOS) expresando su repulsa ante la sentencia de 371 folios que por supuesto no piensan leerse, porque nunca fue tan fácil quedar bien, que en este país somos todos unos quedabienes, aunque ello conlleve llevar la contraria a jueces que llevan dos años de sumario que han tenido acceso a vídeos que no son públicos pero algunos de cuyos contenidos han trascendido. Este caso es un monumento a la miseria humana pero sobre todo encarna lo que hace una buena novela negra, y es la imposibilidad epistemológica de conocer la verdad de algunos crímenes.
Pero vamos al meollo, el mes pasado 10 magrebíes violaron (vioolaron de violar, violar) en el piso donde vivían en Alicante a 3 chicas de 14, 15 y 17 años, grupalmente y durante horas. Por esta noticia han pasado algunos medios de puntillas. En una tertulia el otro día un contertulio sacó a colación y cambiaron rápidamente de tema. A ver, señores, seamos sinceros, seamos honestos ¿Por qué de esto no y eso sí? ¿Cuál es la diferencia? ¿Por qué los MEDIOS DE COMUNICACIÓN deciden ascender la historia de la manada a noticia de alcance nacional, y la historia de la manada joven es ocultada? ¿Alguien sabe responderlo? ¿Por qué no tenemos “manada joven”? ¿Por qué tenemos monográficos, programas especiales, reportajes y dos de pecho televisados cada dos por tres?
Pues la respuesta es fácil. Porque los medios son máquinas de enfrentar y de generar repruebo y rencor, pero de igual manera que cuadno se dispara y hay que apuntar, caudno se genera repruebo también hay que aputnar. Y generar repruebo contra el hombre, el patriarcado, España y el sistema es OK, pero invo car las terriblesy corrosvias ventiscas del repruebo contra 10 magrebíes es estimado “no conveniente”, o no “suficientemente constructivo”.
Y los mismos que el mes pasado, con el horrible asesinato del pequeño Gabriel, hacían control de daños, llamaban a no legislar en caliente, o incluso decían “todos somos Ana Julia” (artículo de un concejal de IU en Madrid), y por supuesto hablaban de que el objetiov de la guandoca es la rehabilitación y no la venganza con la cuestión de la Prisión Permanente Revisable, esos mismos se suman hoy a las masas enfurecidas, pidiendo modificar la legislación en el acto, no ya en caliente sino en ardiendo, y se suman a la escalada verbal contra “la manada” (de energúmenos, que lo son), respecto a la que los MEDIOS han concedido que hay bula para reprobar y reprobar todo lo que, cuando se trata de los 10 magrebíes, callamos todos como pilinguis.
Y ahora vendrá alguno o alguna a decirme a mí, que tengo madre y mujer, que me parece bien lo de la manada. Es el precio que se paga en España por ser un poco coherente. Vivimos en una colonia de hipócritas, pero sobre todo de patéticas marionetas de los medios de comunicación. Sin tanta coreografía, no diferimos tanto de las marchas norcoreanas.