Me lo llevo a un país sin "despertares" y le pago un psiquiatra que le haga darse cuenta de su enfermedad. Y si me meten a la guandoca voy a la guandoca porque mi hijo, una vez se mutila, no tiene vuelta atrás. Yo de la guandoca ya saldría.
A una mala pago a una fruta de lujo de las caras de verdad que se lo ligue y le enseñe lo que es una mujer de verdad y le quite la tontería.