Sostener la economía en un sólo sector, sea el que sea, es poner todos los bemoles en la misma cesta y, como estrategia de éxito es como jugar a la ruleta porque hay miles de variables que pueden salir mal y dejarte con el trastero al aire...(como estamos viendo).
Pero no obstante, no se por qué siempre se denosta tanto al sector del turismo y restauración. Puede ser un motor genial para la economía siempre que sea de calidad, se busque la excelencia y por tanto el valor añadido y conquistar los mejores bolsillos. La estrategia que se ha venido llevando de alcohol barato y habitaciones de saldo o airbnb es cavar nuestra propia tumba porque nos convertimos en un lupanar donde sólo lo más bajo de las sociedades busca, rentando migajas y haciendo un flaco favor a esa "marca España".
Siempre que vemos en las noticias (en años normales) los datos de asistencia de turismo....solo importan los millones de turistas...Yo abogaría por mejorar todos los servicios que se ofrecen, aumentar la calidad de alojamientos, hostelería, todos los servicios asociados y, cobrar más por ello. Con eso te quitas gente de encima, que no renta y que tira abajo tus perspectivas de negocio futuro. Quizá la transición sea algo dura, pero qué mejor que un momento de nulo impacto como éste que vivimos para hacer esa necesaria reconversión.
Y es un buen motor porque ya lo tenemos rodado, el clima nos acompaña para ello y nuestra idiosincrasia también. Que no puede ser el único motor....eso es evidente, necesitamos más motores pero necesitamos que éste, que todos critican, siga tirando con fuerza. A su alrededor pueden surgir más motores como por ejemplo el agroalimentario de alto valor añadido (tenemos que dejar de ser también la huerta barata de europa, tenemos que seguir siendo la huerta, pero alta calidad significa más valor). Tenemos que ser los que modifiquen y saquen el producto final, no simplemente los proveedores de materia prima.