Aqui lo que se ventila no es que se lo pagase Hugo sino que un comunista no tiene derecho a ir en clase preferente, un comunista debe ir en turista y a ser posible en la bodega de carga si es posible habilitarle un habitáculo. Los obreros en alpargatas, como corresponde a su clase, si les invitan, deben rechazar la invitación y escoger el medio mas cutre posible para ir de acuerdo a su prédica, asi, en vez de en un comódo avión de pasajeros, que vayan en un carguero entre la estiba, nada de hoteles donde alojarse, cuadras para ganado, ¿comer? en comedores de caridad, comer en un restaurante seria un signo de lujo contrario a las ideas que predican, a los comunistas hay que aplicarles todo el peso de la moral y sacarles hasta el último resquicio de contradicción, a los comunistas, la ley del enemigo, deben pagar caro poner en cuestión nuestro sagrado orden liberalmientrasnonostoquenlacartera.