Esto no resuelve la cuestión de fondo, y la cuestión de fondo es que hay que DETENER LA INVASIÓN AFRICANA DE EUROPA PROMOCIONADA POR LOS GLOBALISTAS. No vale con impedir que entren 90 o 100 jovenlandeses, no, ES QUE NO DEBE ENTRAR NINGUNO. Y esto sólo se puede conseguir cogiendo el toro por los cuernos, creando leyes que garanticen la EXPULSIÓN INMEDIATA DE TODO AQUEL QUE NO SE ENCUENTRE LEGALMENTE EN EL ESPACIO SCHENGEN
Pero por desgracia, eso no va a ser suficiente. TAMBIÉN, porque esto va a ser inevitable, habrá que intervenir en aquellos países jovenlandeses que no garanticen la seguridad, los derechos fundamentales y una vida mínimamente digna para sus ciudadanos.. Es decir... unos cuantos, por no decir casi todos. Esto significa INVERTIR en esos países, incluso si sus sátrapas no están de acuerdo, sobre todo en educación, industria y empleo, para garantizar a los jovenlandeses un futuro mejor, que haga mejorar sus condiciones de vida, QUE CONTRIBUYAN A FRENAR EL IMPARABLE CRECIMIENTO DEMOGRÁFICO, y que les haga ver en África un mejor futuro que el de una vida incierta en Europa.
Es una tarea titánica y cuyos resultados no se verán a corto plazo. Costará mucho tiempo, y desde luego, mucho dinero y esfuerzo, pero no hay más remedio que hacerla, y cuanto antes mejor. Dejar pasar el problema sólo hará que cuando queramos resolverlo, ya sea imposible.