Me parece una idea interesante, aunque no sea nueva. Yo llevo tiempo pensando en algo parecido, pero en Asturias (busco clima que aporte agua y no sea caluroso ni muy frío, y en un entorno rural y de belleza paisajística). Con las proyecciones climáticas, Asturias se convierte en un lugar ideal, no será tan lluvioso como hasta hace unos años, pero tampoco seco y con veranos tórridos e inviernos muy fríos (como en Ávila). Para mí es muy importante un clima "confortable" y las Castillas y el Mediterráneo se están convirtiendo en un infierno. Creo que el Cantábrico será un buen reducto climático en pocos años (lo que más valoro es que no falte el agua).
Casas autosostenibles (máxima eficiencia energética), huertos ecológicos, zona de corral, horno...depender lo justo del comercio exterior (que tampoco me gustaría que quedara a más de 15 minutos en coche).
Sobre la edad, mi objetivo es que sea una localidad para personas mayores, pero con un equilibrio. Debe haber gente joven especializada en geriatría y que trabaje echando una mano en todas las tareas de mantenimiento del pueblo y el cuidado de los ancianos que lo requieran. Y había pensado en un colectivo mixto, aunque hay algunos comentarios en este hilo que me hacen sentir fatal (soy mujer). Sobre ideología, pues no forzar la convivencia de extremos, pero tampoco ponerse radical y que acabe siendo una secta. Es enriquecedor tener con quién discrepar. Pero para eso haría falta un buen filtro de salud mental, de madurez. Y creo que sería muy enriquecedor que hubiera diversidad de formaciones y profesiones. En lo que discrepo es en lo de incluir personas en riesgo de exclusión social porque ya no tendría edad para montar una ONG ni hacer experimentos buenísticos que puedan salir mal.
Hospital relativamente cerca (ni tan lejos como para que me muera teniendo algo leve, como una lipotímia, un ictus leve, una subida/bajada de glucosa leve... Ni tan cerca como para que me puedan salvar de cualquier cosa y me quedé como un chiquilicuatre).
Tengo 49 años y una situación económica y familiar que me permitiría hacerlo ya. Vamos, que tampoco me imagino que haya que pasar la prueba del bastón para entrar. Y para crear vínculos hay que conocerse antes de determinadas etapas de la vida, en las que uno ya solo vive sumido en sí mismo y se es muy rígido y egocéntrico. No digo que haya que irse con 50 a vivir a un lugar así, pero no estaría mal que durante unos años antes el lugar sea un punto de encuentro de temporadas más o menos largas (vacaciones, puentes...).
En fin, a estas horas por dibujar sueños que no quede, aunque como digo para mí ya tiene categoría de proyecto. Mi inconveniente es que la mayoría de amigas a las que se lo planteo solo ubican el proyecto en un espacio urbano. Y yo no quiero envejecer en una ciudad. Mi hábitat natural es la naturaleza. Creo que seré la típica abuelita que se saca la silla a la puerta por la mañana y ya no se entra a la casita hasta que solo quedan los gatos, jeje.