Depende de lo que ofrezca.
Si ofrece cuidar bien de la familia y educar bien a los hijos, no me importaría mantenerla; sería buena novia/esposa.
Si lo que ofrece es viajes sin poner un euro, fotos en Instagram, ropitas a gastos pagados y cosas, simplemente sería una víbora chupasangres de la que conviene mantenerse alejado.
En lo que nos ocupa, es un flagrante segundo caso.