¿Y si dicen a 2 euros?
Me temo que eso nunca va a suceder, son los políticos los primeros que se lucran de un bien de primera necesidad haciendonos creer que es un bien de consumo.
Lo de 'bien de primer necesidad' es la mayor de las falacias demagógicas que puedas escuchar.
Lo que intentan los políticos al repetir ese tipo de mantras es que tú automáticamente veas la vivienda como algo que dar un tratamiento jurídico y económico distinto. Como es especial, tiene que manejarse especialmente. ES decir, tiene que estar en manos de los políticos.
Pues no, es justo al revés. La comida la necesitas mucho más urgentemente que la vivienda. O la ropa, o el calzado. O puede que necesites un coche para ir a trabajar, que se convierte en primera necesidad. O un PC para producir. O un teléfono.
Ninguno de ellos (aunque todos con regulaciones) llega al absurdo que tiene la vivienda de estar tan en manos de los políticos. ¿Sabes por qué? PORQUE FUNCIONAN.
Por la gran diferencia de que interviniendo el mercado de tomates ni tienen gran oportunidad de poner el cazo, ni tienen excusa alguna cuando el mercado se desabastezca. Porque la excusa estulta de siempre de bancos, ricos, especuladores, ya no es creíble.
Los políticos intervienen la vivienda porque se mueve una pasta acojonante, y es facilísimo 'distraerla' a su bolsillo. Por eso el concejal de urbanismo es el puesto más codiciado, porque una decisión suya de recalificar o no un terreno multiplica por 10 su valor. Imagina la cantidad de influencias y corruptelas de todo tipo que eso atrae.
Pero como siempre, para que eso quede en su poder sin protestas por parte del ciudadano hace falta
un relato. Una explicación global y simplista de que hay algo intrínsecamente malo en ese mercado que solo los políticos pueden solucionar por el bien de todos. Para que cuando protestes, lo hagas a su favor.
Simplemente plantéate porque cuando piensas en el pan o los zapatos no piensas en que sean de primera necesidad ni se te ocurriría que el gobierno hiciera leyes para decir cuanto se tiene que producir o a qué precio. Porque ya sabemos lo que pasa, en demasiados sitios se ha probado.
En el momento en que te crees eso de 'bien de primera necesidad' asumiéndolo como mantra, tu cabeza cambia el chip y aceptará cualquier medida al respecto, por absurda o contraproducente que sea, porque estás justificando que el gobierno tenga más control aún sobre algo que ya tiene controlado. Y que cada vez funcionará peor, y seguirás pidiendo más y más control.