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AD ya alertó en julio a la casta podrida de Lérida: Quince perros mueren envenenados en el barrio leridano con mayor población islámica
El Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil investiga de oficio el envenenamiento en Lérida de al menos 15 perros en el barrio leridano de La Bordeta, ha confirmado el Instituto Armado. La Bordeta es la zona de Lérida que registra una mayor densidad de pagapensiones de confesión islámica, enemiga declarada de nuestras entrañables mascotas, consideradas “animales impuros” en el Corán.
Algunos dueños de los animales han dado la voz de alarma en la red de internet Facebook, según han avanzado este jueves los diarios Segre y La Mañana.
La mayor parte de los perros han sido envenenados cerca de la avenida Artesa y las calles Amposta y Juneda, muy cerca del lugar en el que hace unos años fueron envenenados otros canes, según la asociación Protectora d’Animals Lydia Argilés. Estas muertes coinciden con una serie de campañas contra nuestras mascotas en algunas web islámicas.
El pasado 27 de julio, AD publicaba una carta de Josep Antoni Ortiz, militante de la PxC, en la que textualmente decía: ”…Ya que al señor alcalde le parece bien que estos integristas celebren sus rezos en un lugar público, denunciemos al menos en AD las innumerables quejas de los vecinos del barrio de Cap-pont. Señalan que a ciertas horas del día es practicamente imposible sacar a pasear a sus mascotas sin que sufran las amenazas de un colectivo nada de fiar, que no se caracteriza precisamente por su fiabilidad”.
El origen del rechazo a los perros en el universo islámico se halla en los hádices (hechos o dichos de Mahoma recogidos por otras personas que se consideran fuentes fidedignas). Al respecto se citan dos. En el primero, Gabriel prometió al profeta que iría a visitarle, pero no fue, y más tarde le dijo que los ángeles no entran en una casa en la que haya una imagen o un perro. En el segundo, un tal Abdullah dice que “Alá ha ordenado dar de baja de la suscripción de la vida los perros”.
El Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil investiga de oficio el envenenamiento en Lérida de al menos 15 perros en el barrio leridano de La Bordeta, ha confirmado el Instituto Armado. La Bordeta es la zona de Lérida que registra una mayor densidad de pagapensiones de confesión islámica, enemiga declarada de nuestras entrañables mascotas, consideradas “animales impuros” en el Corán.
Algunos dueños de los animales han dado la voz de alarma en la red de internet Facebook, según han avanzado este jueves los diarios Segre y La Mañana.
La mayor parte de los perros han sido envenenados cerca de la avenida Artesa y las calles Amposta y Juneda, muy cerca del lugar en el que hace unos años fueron envenenados otros canes, según la asociación Protectora d’Animals Lydia Argilés. Estas muertes coinciden con una serie de campañas contra nuestras mascotas en algunas web islámicas.
El pasado 27 de julio, AD publicaba una carta de Josep Antoni Ortiz, militante de la PxC, en la que textualmente decía: ”…Ya que al señor alcalde le parece bien que estos integristas celebren sus rezos en un lugar público, denunciemos al menos en AD las innumerables quejas de los vecinos del barrio de Cap-pont. Señalan que a ciertas horas del día es practicamente imposible sacar a pasear a sus mascotas sin que sufran las amenazas de un colectivo nada de fiar, que no se caracteriza precisamente por su fiabilidad”.
El origen del rechazo a los perros en el universo islámico se halla en los hádices (hechos o dichos de Mahoma recogidos por otras personas que se consideran fuentes fidedignas). Al respecto se citan dos. En el primero, Gabriel prometió al profeta que iría a visitarle, pero no fue, y más tarde le dijo que los ángeles no entran en una casa en la que haya una imagen o un perro. En el segundo, un tal Abdullah dice que “Alá ha ordenado dar de baja de la suscripción de la vida los perros”.
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