San Marco_borrado
Guest
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...puñeteros sociatas.
Sin instituciones financieras que les protegan de sus locuras presupuestarias, con una asociación de empresarios sobrevolando el exiguo botín antes que nadie, para hacerse con los restos del cadáver, con una prensa agónica, más pendiente de tres trajes que de la economía que arruína a los ciudadanos que compran sus periódicos.
La Generalitat Valenciana está en quiebra, no puede pagar de sus propios recursos ninguna factura y cada día ingresa diez veces menos por el drama económico- empresarial de micropymes y autónomos.
Llueven las denuncias de empresas y particulares sobre la Agencia Tributaria del incapaz conseller Vela, el 'gracioso' tecnócrata, de paso en la administración valenciana. Las otrora clases medias que sustentaban el 'establisment' de Zaplana y Camps ya critican hasta las intimidades partidistas de la parejita e irrumpen en el entorno de Fabra, intentando buscar un cabeza de turco 'políticamente profesionalizado' a quién crucificar.
Esta casa es una ruína. No pagarán a los farmacéuticos, ni a los colegios, ni a los agricultores, ni a los científicos, ni al personal de limpieza de La Fé, ni devolverán el IVA de 2010, ni habrá ICO `para autónomos, digan lo que digan. Sólo queda dinero para absorver la deuda de quién financia el partido, es decir, sus sueldos, de aquellos que se divierten y enseñorean a costa de los valencianos en una ruinosa gestión de los coches de la fórmula uno, los que, 'vendiendo' cultura del esfuerzo, siguen recibiendo miles de millones por creación y formación de empleo ó aquellos otros a los que devolver el 'impuesto revolucionario' de parques temáticos, aeropuertos-verguenza y los miles de ejemplares de diarios madrileños que cada día se tiran a los contenedores. Para ésos si hay dinero.
La Generalitat está en quiebra
Sin instituciones financieras que les protegan de sus locuras presupuestarias, con una asociación de empresarios sobrevolando el exiguo botín antes que nadie, para hacerse con los restos del cadáver, con una prensa agónica, más pendiente de tres trajes que de la economía que arruína a los ciudadanos que compran sus periódicos.
La Generalitat Valenciana está en quiebra, no puede pagar de sus propios recursos ninguna factura y cada día ingresa diez veces menos por el drama económico- empresarial de micropymes y autónomos.
Llueven las denuncias de empresas y particulares sobre la Agencia Tributaria del incapaz conseller Vela, el 'gracioso' tecnócrata, de paso en la administración valenciana. Las otrora clases medias que sustentaban el 'establisment' de Zaplana y Camps ya critican hasta las intimidades partidistas de la parejita e irrumpen en el entorno de Fabra, intentando buscar un cabeza de turco 'políticamente profesionalizado' a quién crucificar.
Esta casa es una ruína. No pagarán a los farmacéuticos, ni a los colegios, ni a los agricultores, ni a los científicos, ni al personal de limpieza de La Fé, ni devolverán el IVA de 2010, ni habrá ICO `para autónomos, digan lo que digan. Sólo queda dinero para absorver la deuda de quién financia el partido, es decir, sus sueldos, de aquellos que se divierten y enseñorean a costa de los valencianos en una ruinosa gestión de los coches de la fórmula uno, los que, 'vendiendo' cultura del esfuerzo, siguen recibiendo miles de millones por creación y formación de empleo ó aquellos otros a los que devolver el 'impuesto revolucionario' de parques temáticos, aeropuertos-verguenza y los miles de ejemplares de diarios madrileños que cada día se tiran a los contenedores. Para ésos si hay dinero.
La Generalitat está en quiebra