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Madmaxista
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Este jueves comenzará verse en la Audiencia de Cantabria el caso del homicidio ocurrido en el Mesón El Padrón, en Santillana del Mar, cuando el hostelero disparó contra uno de los ladrones que entraron a robar a su establecimiento, suceso que se remonta al 6 de diciembre de 2009. La Fiscalía pide un año y medio de guandoca para el hostelero. El juicio, con Jurado popular, está previsto que dure hasta el 8 de junio.
En la madrugada de aquel 6 de diciembre el hostelero, Ángel G. O., que dormía en el interior de su establecimiento -medida que tomó tras sufrir varios robos con anterioridad- oyó ruidos y se percató de la presencia de tres hombres. Según el relato de la Fiscalía, el acusado sintió cómo dos de los hombres se dirigían hacia él y, ante el temor de ser atacado, tomó la escopeta de caza que guardaba en un armario, les dio el alto y disparó hacia ellos.
Como consecuencia del disparo, uno de los atracadores, G. S. S., de 33 años, que se encontraba agachado recogiendo las monedas de la máquina tragaperras que acababa de explotar, recibió las perdigonadas que le alcanzaron el corazón y la aorta; trató de huir pero murió a pocos metros del local. Otro de los hombres que entraron al mesón recibió perdigones en la espalda y antebrazo derecho, y el tercero resultó ileso.
El propio acusado llamó desde su establecimiento a las emergencias sanitarias y a la Policía, a la que contó lo sucedido y que él había sido el autor del disparo que acabó con la vida del fallecido. El muerto, de nacionalidad rumana, como los otros dos atracadores, tenía 33 años, estaba casado y era padre de tres hijos menores de edad.
El Ministerio Público considera los hechos dos delitos de lesiones en concurso ideal con un delito de homicidio imprudente. Además, cree que concurre la atenuante de arrepentimiento espontáneo -el hombre llamó al 112- y la eximente incompleta de legítima defensa. De ahí que su petición de condena sea de año y medio de prisión, así como una indemnización de 60.000 euros a la viuda del fallecido.
Bien distinto a la acusación particular, que considera que los hechos constituyen dos delitos de homicidio, uno intentado y otro consumado, de ahí que reclame una condena de trece años de guandoca y 107.000 euros de indemnización. La defensa del acusado. Por su parte, pide la libre absolución al estimar que concurren las eximentes de legítima defensa y miedo insuperable.
Fuente: La Fiscala pide ao y medio para el hostelero que mat a un ladrn. eldiariomontanes.es
Y me digo yo....¿que debería hacer este hombre? ¿abrirlos la puerta? ya sabemos, no nos defendamos ante ladrones, bajémonos los pantalones y no gritemos no sea que los asustemos.
VERGUENZA
En la madrugada de aquel 6 de diciembre el hostelero, Ángel G. O., que dormía en el interior de su establecimiento -medida que tomó tras sufrir varios robos con anterioridad- oyó ruidos y se percató de la presencia de tres hombres. Según el relato de la Fiscalía, el acusado sintió cómo dos de los hombres se dirigían hacia él y, ante el temor de ser atacado, tomó la escopeta de caza que guardaba en un armario, les dio el alto y disparó hacia ellos.
Como consecuencia del disparo, uno de los atracadores, G. S. S., de 33 años, que se encontraba agachado recogiendo las monedas de la máquina tragaperras que acababa de explotar, recibió las perdigonadas que le alcanzaron el corazón y la aorta; trató de huir pero murió a pocos metros del local. Otro de los hombres que entraron al mesón recibió perdigones en la espalda y antebrazo derecho, y el tercero resultó ileso.
El propio acusado llamó desde su establecimiento a las emergencias sanitarias y a la Policía, a la que contó lo sucedido y que él había sido el autor del disparo que acabó con la vida del fallecido. El muerto, de nacionalidad rumana, como los otros dos atracadores, tenía 33 años, estaba casado y era padre de tres hijos menores de edad.
El Ministerio Público considera los hechos dos delitos de lesiones en concurso ideal con un delito de homicidio imprudente. Además, cree que concurre la atenuante de arrepentimiento espontáneo -el hombre llamó al 112- y la eximente incompleta de legítima defensa. De ahí que su petición de condena sea de año y medio de prisión, así como una indemnización de 60.000 euros a la viuda del fallecido.
Bien distinto a la acusación particular, que considera que los hechos constituyen dos delitos de homicidio, uno intentado y otro consumado, de ahí que reclame una condena de trece años de guandoca y 107.000 euros de indemnización. La defensa del acusado. Por su parte, pide la libre absolución al estimar que concurren las eximentes de legítima defensa y miedo insuperable.
Fuente: La Fiscala pide ao y medio para el hostelero que mat a un ladrn. eldiariomontanes.es
Y me digo yo....¿que debería hacer este hombre? ¿abrirlos la puerta? ya sabemos, no nos defendamos ante ladrones, bajémonos los pantalones y no gritemos no sea que los asustemos.
VERGUENZA