SatanClaus
Madmaxista
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Aunque creo que no concuerdo en casi nada con las ideas políticas del creador del hilo, no me queda otra que felicitarlo por lo afilado y mordaz del análisis que ha hecho sobre la relación de Podemos con el sistema, que se parece bastante a la de un anticuerpo con un leucocito: su destino es ser envuelto, asimilado y fagocitado.
El experimento Podemos ha sido muy divertido por los sarpullidos que ha levantado en ciertas personas y medios a los que da gustito ver rabiar. No se debería confundir diversión con afinidad, pero esto es España: si los del Sálvame formasen un partido político, también sacarían eurodiputados.
Tras el 15M, acudí a una de esas asambleas callejeras espontáneas que acabarían siendo el germen de Podemos. Con una tuve suficiente. Desde el principio pude identificar todos los comportamientos y actitudes que tanto se critican en el resto de formaciones políticas: el trepa empeñado en medrar a toda costa, la liturgia, la necesidad de ritualizar y crear símbolos de cohesión, el rechazo al debate interno, el buen rollito más falso que Judas y, sobre todo, la mamonada de querer cambiar el sistema desde dentro, aceptando todas sus reglas, sin romper un plato. Ya desde aquel momento tuve claro que aquello acabaría siendo más de lo mismo. Y en ello están.
Tampoco es como para ponerse a la defensiva, como percibo en muchos foreros conservadores. Podrían votar tranquilamente a Podemos, que no notarán el cambio. Si algo nos ha enseñado lo de Grecia, por si no estuviera claro ya, es que la ciudadanía no tiene poder real para decidir su destino mediante el voto; la democracia es mera estética, las decisiones cruciales se toman al margen de partidos e ideologías, y sin contar con la borregada votante, por supuesto. Y en este sentido Podemos es simplemente una opción más que el sistema oferta para quienes estén cansados de tanto rojo y azul.
[Por cierto, si mezclas rojo y azul, ¿qué sale? jovenlandesado. De toda la vida]
En cuanto a Iglesias, es un personaje sumamente elitista al que la cercanía al poder está despojando de su vestimenta, y ésa es su derrota, aunque llegados a este punto ya no le importe: el foco del poder le deslumbra y le guía a modo de piloto automático.
El experimento Podemos ha sido muy divertido por los sarpullidos que ha levantado en ciertas personas y medios a los que da gustito ver rabiar. No se debería confundir diversión con afinidad, pero esto es España: si los del Sálvame formasen un partido político, también sacarían eurodiputados.
Tras el 15M, acudí a una de esas asambleas callejeras espontáneas que acabarían siendo el germen de Podemos. Con una tuve suficiente. Desde el principio pude identificar todos los comportamientos y actitudes que tanto se critican en el resto de formaciones políticas: el trepa empeñado en medrar a toda costa, la liturgia, la necesidad de ritualizar y crear símbolos de cohesión, el rechazo al debate interno, el buen rollito más falso que Judas y, sobre todo, la mamonada de querer cambiar el sistema desde dentro, aceptando todas sus reglas, sin romper un plato. Ya desde aquel momento tuve claro que aquello acabaría siendo más de lo mismo. Y en ello están.
Tampoco es como para ponerse a la defensiva, como percibo en muchos foreros conservadores. Podrían votar tranquilamente a Podemos, que no notarán el cambio. Si algo nos ha enseñado lo de Grecia, por si no estuviera claro ya, es que la ciudadanía no tiene poder real para decidir su destino mediante el voto; la democracia es mera estética, las decisiones cruciales se toman al margen de partidos e ideologías, y sin contar con la borregada votante, por supuesto. Y en este sentido Podemos es simplemente una opción más que el sistema oferta para quienes estén cansados de tanto rojo y azul.
[Por cierto, si mezclas rojo y azul, ¿qué sale? jovenlandesado. De toda la vida]
En cuanto a Iglesias, es un personaje sumamente elitista al que la cercanía al poder está despojando de su vestimenta, y ésa es su derrota, aunque llegados a este punto ya no le importe: el foco del poder le deslumbra y le guía a modo de piloto automático.
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