Puede que a los estados vasallos (como el nuestro) no nos afecte directamente, pero si indirectamente.
La agenda demócrata, como se ha demostrado con el moreno premio nobel de la paz', es belicista y le gusta ir por el mundo provocando golpes de estado, guerras y migraciones masivas.
El hombre naranja, por otra parte, ha demostrado que pasa de todas esas cosas y se dedica a lo suyo y a su país, así que prefiero a Donaldo mil veces antes que a un viejo schoscho que tendría el control del mayor ejército del planeta.