Hola, nuevamente.
No todo en el “corona” es necesariamente negativo. También se puede aprender.
Prácticamente desde el inicio todos hemos contemplado atónitos cómo se han manipulado descarada e interesadamente los datos, cifras y estadísticas de infectados y fallecidos. En una ciudad y en la otra, en una Comunidad autónoma y en las demás, en un país y en todos. Con el transcurso del tiempo, nos “han ido acostumbrando” a estas falsedades.
Cuando alguien quiere disfrazar una mentira suele recurrir a los datos, los documentos, las estadísticas. Hoy en día casi todo está convenientemente falseado. Son falsos los datos del paro, las encuestas, el IPC, el Euribor, la Deuda Pública, el PIB, la factura de la luz, todo. Absolutamente todo lo que se presenta a través de una cifra, un documento, una estadística, un informe, una resolución o un estudio responde fraudulentamente a los intereses de los que tienen el control sobre dichos medios e instrumentos.
Con el tiempo, las diferentes ciudades, Comunidades autónomas y países han ido homogeneizando sus mentiras. Han ido unificando los criterios para que no sean tan dispares, han ido enmascarando la manipulación que tan claramente veíamos. Y la seguimos viendo, pero de otra forma, “nos han ido acostumbrando”.
Creo que esto es una buena enseñanza. Aunque no nos diésemos mucha cuenta, anteriormente todo estaba ya manipulado pero dentro de unos estándares homogéneos y unos criterios legalmente aceptados. Y la manera como el poder está intentando enmascarar las mentiras sobre los datos del el bichito.-19 es una buena prueba de lo anterior.
“Hay mentiras, malditas mentiras y estadísticas.” ( Mark Twain)
Feliz día.