El cobi19 podría atacar el sistema inmunitario como el VIH al atacar las células protectoras, advierten los científicos
- Investigadores en China y EE. UU. Descubren que el bichito que causa el bichito-19 puede destruir las células T que se supone que protegen al cuerpo de los invasores dañinos
- Un médico dijo que la preocupación está creciendo en los círculos médicos de que el efecto podría ser similar al del VIH.
Los científicos han advertido que el cobi19 que causa el bichito-19 podría dar de baja de la suscripción de la vida las poderosas células inmunes que se supone que dan el pasaporte al bichito.
El sorprendente descubrimiento, realizado por un equipo de investigadores de Shanghai y Nueva York, coincidió con la observación de los médicos de primera línea de que el bichito-19 podría atacar el sistema inmunitario humano y causar daños similares a los encontrados en pacientes con VIH.
Lu Lu, de la Universidad de Fudan en Shanghái, y Jang Shibo, del Centro de Sangre de Nueva York, se unieron al bichito vivo, conocido oficialmente como Sars-CoV-2, en las líneas celulares de linfocitos T cultivadas en laboratorio.
Los linfocitos T, también conocidos como células T, desempeñan un papel central en la identificación y eliminación de invasores extraños en el cuerpo.
Lo hacen al capturar una célula infectada por un bichito, perforar una membrana e inyectar químicos tóxicos en la célula. Estos productos químicos luego dan el pasaporte tanto el bichito como las células infectadas y los hacen pedazos.
Para sorpresa de los científicos, la célula T se convirtió en una presa del cobi19 en su experimento. Encontraron una estructura única en la proteína espiga del bichito que parecía haber desencadenado la fusión de una envoltura viral y una membrana celular cuando entraron en contacto.
Los genes del bichito luego ingresaron a la célula T y la tomaron como rehén, deshabilitando su función de proteger a los humanos.
Los investigadores hicieron el mismo experimento con el síndrome respiratorio agudo severo, o Sars, otro cobi19, y descubrieron que el bichito Sars no tenía la capacidad de infectar las células T.
Sospechaban que la razón era la falta de una función de fusión de membrana. Sars, que mató a cientos en un brote de 2003, solo puede infectar células que portan una proteína receptora específica conocida como ACE2, y esta proteína tiene una presencia extremadamente baja en las células T.
Investigaciones adicionales sobre la infección por cobi19 en células T primarias evocarían "nuevas ideas sobre mecanismos patogénicos e intervenciones terapéuticas", dijeron los investigadores en un artículo publicado en la revista
Cellular & Molecular Immunology esta semana.
Un médico, que trabaja en un hospital público que trata a pacientes con el bichito-19 en Beijing, dijo que el descubrimiento agregó otra evidencia a la creciente preocupación en los círculos médicos de que el cobi19 a veces podría comportarse como algunos de los bichito más notorios que atacan directamente al ser humano. sistema inmune.
"Cada vez más personas lo comparan con el VIH", dijo el médico que solicitó no ser identificado debido a la delicadeza del problema.
En febrero, Chen Yongwen y sus colegas del Instituto de Inmunología del PLA publicaron un informe clínico que advierte que la cantidad de células T podría disminuir significativamente en pacientes con el bichito-19, especialmente cuando eran ancianos o necesitaban tratamiento en unidades de cuidados intensivos. Cuanto más bajo es el recuento de células T, mayor es el riesgo de fin.
Esta observación fue confirmada más tarde por exámenes de autopsia en más de 20 pacientes, cuyo sistema inmunitario fue destruido casi por completo, según informes de los medios de comunicación continentales.
Los médicos que habían visto los cuerpos dijeron que el daño a los órganos internos era similar a una combinación de Sars y Aids.
El gen detrás de la función de fusión en Sars-CoV-2 no se encontró en otros cobi19 en humanos o animales.
Pero algunos bichito humanos mortales como el SIDA y el Ébola tienen secuencias similares, lo que provocó especulaciones de que el nuevo cobi19 podría haberse propagado en silencio en las sociedades humanas durante mucho tiempo antes de causar esta esa época en el 2020 de la que yo le hablo.
Pero hubo una gran diferencia entre Sars-CoV-2 y VIH, según el nuevo estudio.
El VIH puede replicarse en las células T y convertirlas en fábricas para generar más copias para infectar otras células.
Pero Lu y Jiang no observaron ningún crecimiento del cobi19 después de que ingresó a las células T, lo que sugiere que el bichito y las células T podrían terminar muriendo juntos.
El estudio da lugar a algunas preguntas nuevas. Por ejemplo, el cobi19 puede existir durante semanas en algunos pacientes sin causar ningún síntoma. La forma en que interactuó con las células T en estos pacientes no quedó clara.
Algunos pacientes críticos también experimentaron tormentas de citoquinas, donde el sistema inmune reacciona de forma exagerada y ataca a las células sanas.
Pero, ¿por qué y cómo se desencadena el cobi19 que sigue siendo poco conocido?
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