Acabo de tener una conversación telefónica con una vasca mayor de 60 años una de cuyas amigas, de la misma edad, es enfermera y está preocupada por ella y con motivo.
Le digo yo: "Es una vergüenza la falta de material. Fíjate cómo se encrespaba la gente por una cosa como el Prestige, que comparado con ésto es nada..."
Me corta ella. "Oye, no, que el Prestige fue algo terrible y bla, bla..."
Esto, estando sobre la mesas dos casos, el suyo y el de su amiga, que tal vez no pasen el triaje.
Están abducidos por su propia mitología. No hay absolutamente nada que hacer.