No es poco lo que tiene eh, hasta hace un mes lo máximo que teníamos eran problemas del primer mundo: que no puedo ir este finde de puente, que me tengo que esperar un mes para comprarme este o aquel capricho, que estaría mejor tener un piso de 4 habitaciones en vez de 3, y cosas del estilo.Ya antes de que empezara toda esta hez, muchas noches malas me metía en la cama y me pegaba a mi chica sintiéndome agradecido por otro día juntos en paz.
Que sí, que las hemos pasado pilinguis, que lo más que nos hemos llevado han sido palos, pero juntos, y que la verdadera suerte es darle a interruptor y se haga la luz, abrir un grifo y salga agua, la nevera y aunque poco, haya algo de comer.
Y que nadie te tire la puerta abajo o tengas miedo de salir a la calle.
No sé si es conformismo, realismo, sentido de la fatalidad o simplemente humildad, pero al menos eso me queda, haberlo sabido valorar y estarlo valorando ahora como las últimas cucharadas de un helado.
me siento amigablemente en el WC mientras pienso en todo el puñetero planeta.
Los chivatos pelota, verían la escena desde las ventanas entre risas.
Que va, ahora no hay ni pa’ drojas. Alguien ya ha puesto que no se encuentran y otro que triplican el precio, así que pocos van a alcanzar el picoYo un tío cabal??
No tengo ni la menor idea de en qué puede acabar esto, yo estoy aquí esperando a ver si se confirma el retorno de los maestros burbujos (y rezando por ella) para aprender qué se nos puede venir encima y que me al menos me pille preparado.
Mi sensación personal es que nos vamos de vuelta a los ochenta del tirón. Se acabaron los Audis, los BMW y los Mercedes, vuelta a los Seat, los Peugeot y los Renault. Se acabaron las vacaciones en el Caribe y el fin de semana en Berlín y vuelta a las vacaciones en Torrevieja y el fin de semana en la sierra o en el campo. Se acabó el iPhone por reyes y vuelta al balón de fútbol.
Pero vamos, que yo soy un indocumentado y mi predicción no tiene el menor valor.
Sólo espero que si eso pasa los principios y las prioridades también vuelvan a los ochenta. Aquel era un país con un güevo de problemas pero con unos valores infinitamente más sanos que los de ahora. Vivíamos en una sociedad totalmente enferma, desorientada y desquiciada. Llevábamos un camino insostenible. Igual esta leche nos hace más pobres pero nos despierta. Ojalá.
Todos son iguales. Otra cosa es que el forero que citas no sea creible si dice que "todos son iguales", porque lo dira cuando le interesa.La Junta de Andalucía tenía una fábrica de mascaras en Jaén que ha sido intervenida por la Guardia Civil. Tenía cientos de respiradores que han sido llevados a no sé sabe dónde.
El "y tú más" y el "todos son iguales" es un poco más creíble si das casos concretos.
Lo mismo, pero yo creo que nos vamos a los 60:Mi sensación personal es que nos vamos de vuelta a los ochenta del tirón. Se acabaron los Audis, los BMW y los Mercedes, vuelta a los Seat, los Peugeot y los Renault. Se acabaron las vacaciones en el Caribe y el fin de semana en Berlín y vuelta a las vacaciones en Torrevieja y el fin de semana en la sierra o en el campo. Se acabó el iPhone por reyes y vuelta al balón de fútbol.