sociedadponzi
never settle
secundario no, privadoLa gente ha elegido libertad, la salud es algo secundario.
los asunto privados no son secundarios de los colectivos
secundario no, privadoLa gente ha elegido libertad, la salud es algo secundario.
¿ Seguro que todo eso es así, tal cual lo cuenta ?Muchas veces los contagios siguen un patron de simple azar, sobre todo despues de una ola fuerte. Muchas veces, la gente que mas chupapollea, es gente que ya ha etado contagiada y por eso no hay estallidos repentinos continuos. O puede que por simple casualidad, los contagiables no se han cruzado con contagiadores. O puede que por casualidad esos contagiadores se hayan aislado. Pero todo eso son como sacos de tierra que se ponen junto a un rio apunto de desbordarse
Luego basta que un grupito se desmelene y que contagie a un sector de gente de fuera de los circuitos habituales... o que la gente que estaba en su casa se ponga a chupapollear y entre en esos circuitos, para que vuelvan a haber mas estallidos. Es decir, basta que un saco de tierra se hunda, para que el agua abra una brecha y todo el dique se vaya a tomar por trastero
Si fuera la primera pues vale, pero ya van varias. Pero parece que a nadie le importa, asi que solo queda la opcion del salvese quien pueda. Quien le interese protegerse que lo haga por si mismo, porque la sociedad, la autoridad y la patria, queda claro que ya no existen
La gente ha elegido no la libertad, que a saber qué es eso exactamente, la gente ha elegido la Nueva Mortalidad. Un nuevo concepto que desplaza al con poca gracia de Nueva Normalidad.La gente ha elegido libertad, la salud es algo secundario.
Muy mal se tiene que poner Madrid para que Ayuso pida un estado de alarma (votos mandan, además los muertos no votan)
Ahora bien, creo que no va a haber más estados de alarma, la nueva táctica Redondo va a ser habilitar una ley para que cada autonomía decrete lo que le de la gana.
Así, si Ayuso se ve obligada a tomar medidas, las tomará ella, no el gobierno central, y así no podrá acusar al socialcomunismo de cohartar la libertad de vivir a la madrileña
Hola, buenas.
Vivimos en la sociedad de la palabra. Hemos dotado a la simple palabra de una relevancia superior incluso al propio significado de la misma. Es la cultura de las redes, del wasap, del tuit, de la frase hecha, de la consigna o de la palabra simple. En contrapartida, no son buenos tiempos para las ideas, ni para los argumentos y mucho menos para las explicaciones.
De este fenómeno se aprovechan las autoridades políticas y sanitarias para así manipularlos en esta grave esa época en el 2020 de la que yo le hablo, distorsionando a conveniencia el lenguaje mediante conceptos y palabras que, realmente, no son representativos de la realidad. Veamos algunos ejemplos:
1.- Al principio, “afortunadamente el bichito no mutaba”. Cuando descubrimos que era incierto, se sustituyó el término mutación por el de “variante” (que suena menos apocalíptico)
2.- Las banderillas “inmunizan”. Yo no soy contrario a las banderillas pero, en el mejor de los casos, se debería emplear el término ayudan, mejoran o tienen “utilidad”, pero en ningún caso el de inmunidad, máxime cuando no evitas el contagio, ni la transmisión de la enfermedad ni tampoco son eficaces para determinadas variantes.
3.- Se ha acordado el “distanciamiento social”. Este término se emplea para dotar de mayor contundencia a la medida pero es absolutamente incorrecto. El distanciamiento social es la falta de relación o contacto entre los diferentes estratos o grupos sociales que conforman la sociedad.
El término correcto sería “distanciamiento físico”, en el sentido de guardar la distancia entre las personas
4.- Cuando ordenaron el encierro en nuestras casas, se acuño el término “confinamiento domiciliario”. Esta expresión, de aparente gravedad, es una contradicción semántica en sí misma, porque cuando se confina a alguien se hace como una pena o condena en la que se obliga a vivir a alguien en un lugar distinto al de su domicilio (destierro).
El término correcto sería cuarentena o “encierro en casa”, pero esta expresión resulta más vulgar y menos sofisticada que la de confinamiento domiciliario.
5.- Es la época de la “Nueva normalidad”. Lo que es nuevo no es normal y para cuando quiere ser normal, ya se ha hecho viejo. En realidad utilizan esta expresión para que los nuevos cambios introducidos en nuestros derechos y libertades nos parezcan normales.
Una expresión más adecuada podría ser época de “Cambio e incertidumbre”, que refleja mejor la situación actual.
6.- Sube, baja o se aplana la “curva”. Curvas y peligrosas son las de Scarlett Johansson (dicho con respeto).
Pero denominar curva para referirse a los infectados o fallecidos es una ocultación de la gravedad del problema. La expresión correcta es “suben o bajan los infectados, hospitalizados o los fallecidos”. Estamos hablando de personas, de seres humanos, no de fríos gráficos.
7. Los diferentes Organismos Sanitarios han “aprobado” las banderillas. No han aprobado nada porque no se ha cumplido el protocolo y los requisitos mínimamente imprescindibles exigidos por Ley para su aprobación.
En todo caso, las banderillas han sido “autorizadas” por razones de emergencia sanitaria, que no es lo mismo porque implica un mayor riesgo en su uso y comercialización.
8.- Hemos iniciado la “desescalada”. Dicho así resulta más técnico, sofisticado y meritorio para quien la dirige.
Pero un alpinista nunca ha desescalado nada, simplemente baja o desciende. (“descenso”)
9.- Las banderillas son “seguras y eficaces” en un 95%. Esta expresión no es correcta porque engloba una generalidad abstracta, que no concreta ni el tiempo, ni el tipo de eficacia, ni los posibles efectos adversos futuros.
Es mucho más correcto decir que “no sabemos la seguridad y la eficacia real de las banderillas” con el transcurso del tiempo porque únicamente, a medida que vaya pasando el tiempo, podremos determinar dichos aspectos.
“De esta salimos más fuertes” (Campaña de Moncloa del 25 de mayo de 2020).
Bueno, no sabemos la realidad de la anterior afirmación, pero lo que si os puedo asegurar es que : “De esta salimos más viejos” ( si salimos, claro).
Que tengáis buen día.
Ahí sigue siendo extraño lo relativamente poco que se ha propagado y lo largo de la incubación. El barco debió salir de la India, si venia de allí, en los primeros días de Abril como muy tarde. Esto da un mes para 4 contagios y los síntomas han tardado todo eso en aparecer. Si el barco hubiese hecho escalas entonces podría ser posterior el contagio pero la variante no sería la India, seria cualquiera de las prevalentes en África. El barco creo que no es muy grande, pero tendrá bastantes más tripulantes que esos 4, al menos unas decenas.Parece que en el barco indio fondeado en la bahía de Las Palmas, de sus 4 tripulantes con el bichito, 1 está en el hospital y el otro habría muerto hace unas semanas.