En lo MACRO son los impuestos los que sostienen el ESTADO; pero la economía sumergida sostiene a lo MICRO (personas, familias, pequeñas empresas)... Y sin esa economía sumergida no hubiera podido haber MACRO, porque lo MACRO es disfuncional. Además, la economía sumergida sólo deja de ser fiscalizada en un primer paso; pero luego ese dinero no declarado fluye dentro del mercado para comprar-vender bienes y servicios que sí cotizarán.
A lo que me refiero es que la economía sumergida siempre ha sido consentida, porque de lo contrario se le hubieran visto las costuras al sistema desde hace mucho.
La explicación más certera para esta campaña antifraude es una que los estatófilos no se creen; bueno los estatófilos de derechas sí, pero culpan al gobierno de izquierdas de acometer ese plan... Ese plan es el de acabar con el mayor número de pymes, y que toda la riqueza y mercado de éstas pase a manos de la gran empresa.
Sí, es un asunto de ESTADO, ante la crisis sistémica, y final, en la que estamos inmersos... Y lo hace la izquierda porque, nos guste o no, el SISTEMA (que todos defendéis) ha logrado imponer la superioridad jovenlandesal de la izquierda, por tanto, todo lo que la izquierda haga está bien hecho o es el mal menor... y ese misma propaganda ha logrado imponer que la derecha lo hace todo por maldad (papel que la derecha asume sin problemas).
La cruda realidad es que izquierda siempre ha sido la mejor y mayor defensora del GRAN CAPITAL (estatal y/o privado), y esto no sólo lo niegan los izquierdistas, sino que gran parte de los derechistas siguen perorando contra un supuesto comunismo anticapitalista que nos invade...
La única opción para evitar el triste final que el dúo ESTADO-CAPITAL nos tiene reservado es tomar el camino (largo y duro) de crear una sociedad autogobernada en asambleas omnisoberanas, con derecho consuetudinario, bienes comunales, propiedad privada conseguida sin trabajo asalariado (o el mínimo posible) y pueblo en armas.