El departamento de marketing de nuestra editorial no apreció nuestro título y en su lugar surgió con "La tiranía de las buenas intenciones." Nos preguntamos qué significaba este título. El departamento de marketing le respondió que se demostró que la guerra contra el crimen, lo que nos dio los abusos de RICO, la guerra contra los abusadores de niños, que nos dio juicios de inocentes totales que superó a juicios de los héroes de la revolución bolchevique de José Stalin, y la guerra contra las drojas, que dio "libertad y la democracia América" familias rotas y de lejos la tasa de encarcelamiento más alta del mundo todo se debió a las buenas intenciones de luchar contra la delincuencia, para combatir las drojas, y para combatir el abuso infantil. El título del editorial parecer tuvo éxito, ya que 15 años más tarde el libro está todavía en impresión. Ha vendido suficientes copias en estos años que se habían producido las ventas desde su publicación habría hecho el libro un "best seller". El libro, de haber sido un éxito de ventas, habría ganado más atención, y tal vez las escuelas de derecho y colegios de abogados podría haber utilizado para mantener el estado policial en la bahía.
Whitehead documenta lo difícil un veredicto de no culpable es de conseguir para un acusado inocente. Incluso si el acusado falsamente acusado y su abogado sobreviven presión del fiscal para negociar un acuerdo con el fiscal y llegar a un juicio, se enfrentan a los miembros del jurado que no pueden dudar de los fiscales, la policía, o testigos pagados para mentir contra el acusado inocente. Los miembros del jurado, incluso condenados los pocos sobrevivientes de asalto del régimen de Clinton en los Davidianos de Waco, los pocos que no fueron gaseados, tiro, o quemado hasta la fin por las fuerzas federales. Esta secta religiosa fue demonizado por Washington y los medios de comunicación presstitute como abusadores de niños que estaban fabricando armas automáticas mientras que violaron a niños. Las acusaciones resultaron ser falsas, como la de Saddam Hussein "armas de destrucción masiva", y así sucesivamente, pero sólo después de que todos los inocentes fueron muertos o en la guandoca.
La pregunta es: ¿por qué los estadounidenses no sólo se sientan en silencio, mientras que la vida de los inocentes se destruyen, sino también realmente apoyan la destrucción de la vida de los inocentes? ¿Por qué los estadounidenses cree que "fuentes oficiales" a pesar del hecho probado de que "fuentes oficiales" se encuentran en varias ocasiones y nunca dicen la verdad?
La única conclusión que se puede llegar es que el pueblo estadounidense ha fallado. Hemos fallado Justicia. Hemos fallado Misericordia. Hemos fallado la Constitución de Estados Unidos. Hemos fallado Verdad. Hemos fallado democracia y el gobierno representativo. Hemos fallado a nosotros mismos ya la humanidad. Hemos fallado la confianza que nuestros padres fundadores pusieron en nosotros. Hemos fallado a Dios. Si hemos tenido el carácter que nos dijeron que teníamos, es evidente que hemos perdido. Poco o nada queda de la "carácter americano".
Fue el carácter americano presente en las prisiones de tortura de Abu Ghraib, Guantánamo, y calabozos ocultos tortura de la CIA, donde el personal militar y de la CIA proporcionaron pruebas fotográficas de su placer en hacer daño y abusar de los prisioneros? Los informes oficiales han concluido que, junto con la tortura fue violación, sodomía, y el asesinato. Todo esto fue presidida por los psicólogos americanos con Ph.D. grados.
Vemos la misma inhumanidad en la policía estadounidense que responda a las mujeres los niños, los ancianos, la violencia física y mentalmente discapacitado, con gratuidad. Sin razón alguna, asesinato policial, taser, batir, y abusar de los ciudadanos estadounidenses. Cada día son más los informes, ya pesar de los informes de la violencia sigue y sigue y sigue. Es evidente que la policía disfruta infligiendo dolor y la fin a los ciudadanos a quien se supone que la policía de servir y proteger. Siempre ha habido matones en la fuerza policial, pero la violencia policial indiscriminada de nuestro tiempo indica un colapso completo del carácter estadounidense.
El fracaso del carácter americano ha tenido enormes consecuencias desastrosas y para nosotros mismos y para el mundo. En casa de estadounidenses tienen un estado policial en el que todas las protecciones constitucionales han desaparecido. En el extranjero, Irak y Libia, dos países anteriormente prósperas, se han destruido. Libia ya no existe como país. Un millón de iraquíes muertos, cuatro millones de desplazados en el extranjero, cientos de miles de huérfanos y los defectos de nacimiento de los artefactos de América, y la continua violencia en curso de las facciones que luchaban sobre los restos. Estos hechos son incontestables. Sin embargo, el Gobierno de los Estados Unidos afirma que ha traído la "libertad y la democracia" a Irak. "Misión cumplida", declaró uno de los asesinos de masas del siglo 21, George W. Bush.
La pregunta es: ¿cómo puede el gobierno de Estados Unidos hacer una reclamación indignante tan obviamente falsa sin ser gritado por el resto del mundo y por su propia población? Es la respuesta que buen carácter ha desaparecido del mundo?
¿O es que el resto del mundo también tiene miedo de protestar? Washington puede obligar a los países supuestamente soberanos para consentir a su voluntad o de ser separado del mecanismo de pagos internacionales que los controles de Washington, y / o ser sancionados, y / o ser bombardeado, droned o invadido, y / o ser asesinado o derrocado en un golpe de Estado. En todo el planeta Tierra sólo hay dos países capaz de hacer frente a Washington, Rusia y China, y tampoco quiere ponerse de pie si pueden evitarlo.
Por alguna de las razones, no sólo los estadounidenses, pero la mayor parte del mundo, así cabida a Washington del mal y por lo tanto son cómplices en el mal. Esos seres humanos con una conciencia jovenlandesal están siendo gradualmente posicionados por Washington y Londres como "extremistas domésticos" que podrían tener que ser detenidos y colocados en centros de detención. Examinar las recientes declaraciones del general Wesley Clark y el primer ministro británico Cameron y recordar la declaración de Janet Napolitano que el Departamento de Seguridad Nacional ha cambiado su enfoque de los terroristas a los extremistas domésticos, un término indefinido y abierto.
Estadounidenses con buen carácter están siendo maniobrado en una posición de indefensión. Como John Whitehead deja claro, el pueblo estadounidense ni siquiera pueden evitar "su policía", pagados por sus pagos de impuestos, desde el asesinato de 3 estadounidenses cada día, y esto es sólo los asesinatos registrados oficialmente. La cuenta real es probablemente mayor.
Qué Whitehead describe y lo que he notado desde hace muchos años es que el pueblo estadounidense ha perdido, además de su propio sentido de la verdad y la falsedad, cualquier sentido de la misericordia y la justicia para otros pueblos. Los estadounidenses aceptan ningún sentido de la responsabilidad de los millones de personas que Washington ha exterminados en las últimas dos décadas que datan del segundo mandato de Clinton. Cada uno de los millones de muertes se basa en una mentira Washington.
Cuando la secretaria de Estado de Clinton, Madeleine Albright, se le preguntó si las sanciones del régimen de la Clinton, que había cobrado la vida de 500.000 niños iraquíes, estaban justificadas, ella obviamente no esperaba la indignación del pueblo estadounidense cuando ella respondió afirmativamente.
Los estadounidenses necesitan para hacer frente a los hechos. La pérdida de carácter significa la pérdida de la libertad y la transformación del gobierno en una empresa criminal.
La pesadilla americana: La Tiranía del Sistema de Justicia Penal
John W. Whitehead
El Instituto Rutherford
22 de julio 2015
Justicia en América no es todo lo bueno como pretende ser.
Pregúntale a Jeffrey Deskovic, quien pasó 16 años en prisión por una violación y asesinato que no cometió. A pesar del hecho de que el ADN de Deskovic no coincidía con lo que se encontró en la escena del crimen, que fue identificado por la policía como sospechoso porque él lloró en el funeral de la víctima (que tenía 16 años en ese momento), a continuación, acosado en el transcurso de dos meses de confesar su culpabilidad. Fue finalmente pagó $ 6.5 millones en la reparación.
James Bain pasó 35 años en prisión por el secuestro y violación de un niño de 9 años de edad, pero también él era inocente del crimen. A pesar de que el caso del fiscal era frágil-que giraba en torno a la similitud de nombre de Bain al del violador, la propiedad de Bain de una motocicleta de tonalidad rojo, y una identificación errónea de Bain en una alineación por una histérica 9 años de edad, niño de Bain fue condenado a cadena perpetua. Finalmente fue liberado después de la prueba de ADN demostró su inocencia y se pagó $ 1.7 millones.
Marcos Weiner tuvo relativamente fácil cuando se compara su experiencia a los miles de personas que están pasando tiempos de vida tras las rejas por delitos que no commit.Weiner fue injustamente detenido, condenado y encarcelado durante más de dos años por un crimen que no lo hizo demasiado comprometerse. En su caso, una mujer joven afirmó Weiner la había secuestrado, la tiró fuera y luego envió mensajes de texto insultantes a su novio sobre sus planes de violarla. A pesar de que las señales de telefonía celular, relatos de testigos y expertos testimonios indicaron que la joven había inventado todo el incidente, el fiscal y el juez rechazó repetidamente ninguna evidencia que contradice cuenta inverosímil de la mujer, la condena Weiner a ocho años más en la guandoca. Weiner fue lanzado solamente después de su acusador fue sorprendido vendiendo cocaína a policías encubiertos.
Mientras tanto, Weiner perdió su trabajo, su casa y sus ahorros, y el tiempo con su esposa y su hijo pequeño. Como advirtió Slate reportero periodista Dalia Lithwick, "Si alguien sugiere que el hecho de que Mark Weiner fue lanzado esta semana significa" el sistema funciona ", me temo que voy a tener que darle un puñetazo en el cuello. Debido a que en todos y cada uno a su vez, el sistema que debería haber trabajado para considerar la prueba de la inocencia de Weiner le falló ".
El sistema que debería haber trabajado no lo hizo, porque el sistema está roto, casi sin posibilidad de reparación.
En los thrillers judiciales como 12 Angry Men y dar de baja de la suscripción de la vida a un ruiseñor, la justicia se sirve en el final, porque alguien, ya sea miembro del jurado # 8 o Atticus Finch-opta por permanecer en el principio y la maldad desafío, y la verdad gana.
Por desgracia, en el mundo real, la justicia es más difícil de conseguir, la equidad es casi desconocida, y la verdad rara vez gana.
Sobre el papel, es posible que su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, pero en realidad, que ya ha sido juzgado, declarado culpable y condenado por agentes de policía, fiscales y jueces mucho antes de que aparezcan en una sala del tribunal. La injusticia crónica se ha convertido el sueño americano en una pesadilla. A cada paso en el camino, si se trata de encuentros con la policía, el trato con los fiscales, las audiencias en el tribunal ante jueces y jurados, o penas de guandoca en una de las muchas prisiones de la nación, el sistema está plagado de corrupción, abuso y una indiferencia atroz para los derechos de la ciudadanía.
Derechos de debido proceso que ofrece a una persona acusada de un crimen: el derecho a guardar silencio, el derecho a ser informados de los cargos en su contra, el derecho a la representación por un abogado, el derecho a un juicio justo, el derecho a un juicio rápido, el derecho a probar su inocencia con testigos y pruebas, el derecho a una fianza razonable, el derecho a no languidecer en la guandoca antes de ser juzgado, el derecho de confrontar sus acusadores, nada etc.- significa cuando se permite al gobierno a dejar de lado esas salvaguardias contra el abuso siempre conveniente.
Se dice que mientras el presidente Obama dijo que todas las cosas correctas sobre el estado rota de nuestro sistema de justicia penal, que la guandoca demasiados estadounidenses por delitos no violentos (hacemos un 5 por ciento de la población mundial, pero nuestra población carcelaria constituye casi el 25% de prisioneros del mundo), que gastamos más dinero en la guandoca que cualquier otro país (80 $ millones de dólares al año), que nosotros condenamos personas por penas de prisión más largas que su mérito crímenes, que nuestro sistema de justicia penal está lejos de ser daltónico, que el tubería de la escuela a la prisión de la nación está contribuyendo a cárceles superpobladas, y que tenemos que centrarnos en la rehabilitación de los delincuentes en lugar de castigo, él no pudo poseer hasta importante el papel del gobierno en la contribución a esta injusticia en América.
En efecto, mientras que Obama colocó la responsabilidad de la reforma de lleno en las manos de los fiscales, los jueces y la policía, él no pudo reconocer que soportan la carga de nuestro sistema de justicia fallado, junto con las legislaturas y las corporaciones que han trabajado con ellos para crear un entorno que es hostil a los derechos de los acusados.
En este clima, estamos todos los acusados, a los culpables y el sospechoso. Como documento en mi libro Battlefield America: La guerra contra el pueblo estadounidense, estamos operando en un nuevo paradigma donde se presume la ciudadanía culpable y tratado como sospechosos, nuestros movimientos rastreados, nuestras comunicaciones monitoreados, nuestra propiedad confiscada y buscaron, nuestra integridad corporal caso omiso, y nuestros derechos inalienables a la "vida, libertad y la búsqueda de la felicidad" rendido insignificante si se compara con las prioridades del gobierno.
Cada estadounidense está ahora en peligro de ser blanco y castigado por un crimen que no cometió, gracias a una sobreabundancia de leyes arcanas. Para empeorar las cosas, al permitir que los agentes del gobierno para operar por encima de la ley, inmune a las malas acciones, hemos creado una situación en la que la ley es de un solo lado y de arriba hacia abajo, que se utiliza como un martillo para oprimir a la población, al tiempo inútil en protegiéndonos contra los abusos del gobierno.
Añadir a la mezcla un sistema con fines de lucro de encarcelamiento en que los gobiernos estatal y federal se comprometen a mantener las cárceles completa a cambio de que las empresas privadas se ejecutan las prisiones, y se dará cuenta de la única palabra para describir tal estado de abyecta corrupción es " mal ".
¿Cómo si no se explica un sistema que permite a los agentes de policía para disparar primero y preguntar después, sin ningún tipo de consecuencias reales para sus fechorías? A pesar de la protesta inicial sobre los tiroteos de individuos desarmados en Ferguson y Baltimore, el ritmo de disparos de la policía aún no ha sido más lento.
Para aquellos que sobreviven a un encuentro con la policía sólo para terminar en el interior de una celda de la guandoca, a la espera de un "juicio justo y rápido," es a menudo una larga espera. Tengamos en cuenta que el 60 por ciento de las personas en las cárceles del país aún no se han condenado por un crimen. Hay 2,3 millones de personas en cárceles o prisiones en Estados Unidos. Los que no pueden pagar la fianza, "algunos de ellos inocentes, la mayoría de ellos no violenta y una gran mayoría de ellos pobres," pasarán unos cuatro meses en la guandoca antes de que lleguen a juicio.
Ni siquiera que prometió "día en la corte" es una garantía de que se hará justicia.
Como juez Alex Kozinski de la Corte del Noveno Circuito de Apelaciones señala, hay un sinnúmero de factores que pueden hacer que un hombre inocente o mujer un criminal y enjaulado para la vida: los testigos no fiables, las pruebas forenses falibles, imperfectos recuerdos, confesiones forzadas, duro tácticas de interrogatorio, los jurados no informados, mala conducta de la fiscalía, la evidencia falsificada y frases excesivamente duras, por nombrar sólo algunos.
A principios de 2015, el Departamento de Justicia y el FBI "reconocieron formalmente que casi cada examinador en una unidad forense del FBI elite dio testimonio defectuoso en casi todos los ensayos en los que se ofrecen pruebas contra los acusados durante más de un período de dos décadas .... Las admisiones marcan un hito en uno de los mayores escándalos de forenses del país, destacando el fracaso de los tribunales de la nación durante décadas para mantener la información científica falsa de los jurados, dijeron analistas legales ".
"¿Cómo lo hacen los científicos forenses deshonestos y otros malos policías prosperan en nuestro sistema de justicia penal?", Se pregunta el juez Kozinski. "La respuesta simple es que algunos fiscales hacen la vista subida de peso a la mala conducta porque están más interesados en la obtención de una convicción de lograr un resultado justo."
El poder de los fiscales no debe ser subestimada. Cada vez más, cuando hablamos de personas inocentes encarcelados por crímenes que no cometieron, el fiscal juega un papel fundamental en el logro de esa injusticia. Como informa el diario The Washington Post, "Los fiscales ganan 95 por ciento de sus casos, el 90 por ciento de ellos sin tener que ir a juicio .... ¿Son los fiscales estadounidenses que mucho mejor? No ... es por el acuerdo con el fiscal, un sistema de intimidación e intimidación por los abogados del gobierno para el que "sería inhabilitado en la mayoría de otros países serios ... '".
Este fenómeno de la gente inocente de declararse culpable hace una burla de todo lo que el sistema de justicia penal se supone que debe estar parado para: la equidad, la igualdad y la justicia. Como concluye el juez Jed S. Rakoff, "nuestro sistema de justicia penal es casi exclusivamente un sistema de negociación de los cargos, negociado a puerta cerrada y sin supervisión judicial. El resultado está determinado en gran medida por el fiscal por sí sola ".
Se estima que entre el 2 y el 8 por ciento de los criminales convictos que han acordado acuerdo con el fiscal de un fiscal (recuerde, hay 2,3 millones de presos en Estados Unidos) están en la guandoca por delitos que no cometieron.
Claramente, la Coalición para la Seguridad Pública estaba en lo correcto cuando se llegó a la conclusión, "Usted no necesita ser un criminal para que su vida destruida por el sistema de justicia penal de Estados Unidos."
No siempre fue así. Como relata el juez Rakoff, los Padres Fundadores previeron un sistema de justicia penal en el que el elemento crítico "fue el juicio por jurado, que sirvió no sólo como un mecanismo de búsqueda de la verdad y un medio para el logro de la equidad, sino también como un escudo contra la tiranía."
Ese escudo contra la tiranía hace tiempo que se ha hecho añicos, dejando a los estadounidenses vulnerables a las crueldades, vanidades, errores, ambiciones y codicia del gobierno y sus socios en el crimen.
No hay suficiente dinero en el mundo para hacer reparación a las personas cuyas vidas han sido perturbadas por condenas erróneas.
Durante el último cuarto de siglo, más de 1.500 estadounidenses han sido liberados de la guandoca después de haber sido absuelto de los delitos que no cometieron. Estos son los afortunados. Por cada preso exonerado que es capaz de demostrar su inocencia después de 10, 20 o 30 años tras las rejas, el juez Kozinski estima que puede haber decenas que son inocentes, pero no puede demostrarlo, sin acceso a abogados, pruebas, el dinero y las vías de recurso.
Para aquellos que todavía tienen que experimentar plenamente la injusticia del sistema americano de justicia, es sólo una cuestión de tiempo. Estados Unidos ya no opera bajo un sistema de justicia que se caracteriza por el debido proceso, la presunción de inocencia, la causa probable, y prohibiciones claras sobre extralimitación del gobierno y el abuso policial. En cambio, nuestros tribunales de justicia se han transformado en los tribunales de orden, la defensa de los intereses del gobierno, en lugar de defender los derechos de los ciudadanos, consagrados en la Constitución.
Sin cortes dispuestos a respetar las disposiciones de la Constitución, cuando los funcionarios del gobierno hacen caso omiso de ellos, y una ciudadanía los conocimientos suficientes para estar indignados cuando se ven socavados dichas disposiciones, la Constitución ofrece poca protección contra el estado policial.
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