Reunión de Serguéi Lavrov con el Presidente del Gobierno de Unidad Nacional de Libia, Abdul Hamid Dbeibeh.
El 15 de abril, el Presidente del Gobierno de Unidad Nacional de Libia, Abdul Hamid Dbeibeh, llegó a Moscú en visita de trabajo encabezando una delegación representativa. Están programadas y ya se celebran sus reuniones con los representantes de los Ministerios y departamentos de Rusia, con los más altos cargos de nuestro país. Se trata de su reunión con el Presidente del Gobierno de Rusia, Mijaíl Mishustin, y el Ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov.
El Gobierno de Unidad Nacional de Libia es un órgano ejecutivo de transición cuya misión principal consiste en preparar y celebrar las elecciones nacionales el 24 de diciembre de 2021. Aplaudimos los avances en el proceso político en Libia y consideramos que la actividad de las autoridades de transición dirigida a unir las instituciones públicas y organizaciones financieras y económicas separadas anteriormente como una etapa importante en el camino hacia la normalización de la situación en este país amigo.
En el curso de la visita de Abdul Hamid Dbeibeh, se abordarán aspectos de arreglo político en Libia y las perspectivas de desarrollo de las relaciones bilaterales en el ámbito político, económico y comercial.
Próximas negociaciones de Serguéi Lavrov con el Primer Ministro del Líbano, Saad Hariri
El Primer Ministro designado del Líbano, Saad Hariri, está en Moscú por invitación del Presidente del Gobierno de Rusia, Mijaíl Mishustin. El 16 de abril, Serguéi Lavrov se reunirá con este eminente político libanés.
Se planea abordar la situación en el Líbano donde continúa un proceso complicado de formación de un nuevo gabinete de ministros y otros problemas acuciantes de la región de Oriente Próximo. Se discutirán asimismo los aspectos de desarrollo de la interacción bilateral ruso-libanesa.
Doble rasero aplicado por EEUU a la lucha contra el terrorismo e informes de prensa sobre el nuevo líder del EI, Amir Muhammad Sa'id Abdal-Rahman al-Mawla.
Últimamente, la Voz de América, Bloomberg y The New York Times publicaron filtraciones sobre los supuestos “contactos de Moscú con los islamistas”. Hablando francamente, provoca extrañeza que los medios estadounidenses dediquen más atención a semejantes noticias falsas y desinformaciones sobre los vínculos de otros Estados con los yihaistas que al apoyo prestado a los terroristas por su propio país.
Precisamente en EEUU aparecieron los comunicados sobre el nuevo líder del Estado Islámico, Amir Muhammad Sa'id Abdal-Rahman al-Mawla, ex informante de Washington. Alegando los publicados protocolos de sus interrogatorios, The Washington Post narra los detalles de su colaboración con las autoridades de EEUU, informa de los datos que les había transmitido.
Dado que The Washington Post goza de acreditado prestigio en su país, semejantes declaraciones merecen la más detenida atención e interés por parte de otros medios de EEUU.
El artículo arriba mencionado vuelve a confirmar por enésima vez que la política de doble rasero ha transfundido todos los estratos de la sociedad estadounidense. En el caso dado, lamentablemente, la comunidad periodística, que ha de ser objetiva e imparcial, no ha sido una excepción. Por lo menos, nos aseguraban que se regían por estos principios.