Hay que crear una gran estrategia de inversión directa pensando en las manufacturas, para mejorar el sector productivo y atraer a los inversores que van a dar trabajo a los ingenieros y otros perfiles técnicos
Habría que preguntarse qué entiende esta 'economista' por 'inversión directa' y por 'manufactura'
Siendo una asesora del Gobierno, debemos entender que con 'inversión' quiere decir financiación mediante en endeudamiento. El Gobierno, junto con grupos de empresarios crony, montan una fábrica de vehículos eléctricos y todo ello lo financia un grupo de bancos alemanes, americanos y japoneses.
Bien, la mala noticia es que quien están haciendo esa inversión son los ahorradores / depositantes de esos bancos y que esa nueva factoría es una factoría que forma parte de las economías alemana, americana y japonesa, no de la economía española aunque por el accidente del territorio, el valor de esos vehículos se sume al PIB de la economía española.
Volkswagen, por ejemplo, es un fabricante alemán de coches, aun cuando los coches que esa compañía alemana produce en territorio español, se sumen al PIB de la economía española.
Una economía no puede invertir sin ahorradores y en España no queda ningún ahorrador tras 120 años de socialismo aniquilando ahorradores.
La otra cuestión es la 'manufactura', que esta señora debe confundir con 'industria' frente al extraño concepto de 'servicios' que usan los economistas.
Un problema general de los economistas es que ignoran por completo qué es, para qué sirve o cómo funciona la industria.
Uno de los países más industriales del mundo es Suiza, a pesar de que en Suiza apenas hay fábricas, trabajadores vestidos de azul o actividad manufacturera. Y es que la industria corresponde a países ricos, con salarios muy altos, mientras que la actividad manufacturera se hace en países pobres con salarios bajos.
La actividad industrial consiste, en esencia, en desarrollar un nuevo producto, en diseñar una linea de producción y en utilizar esa linea de producción para fabricar en serie copias de ese nuevo producto.
Por ejemplo:
Paso 1, La investigación: Un laboratorio farmacéutico descubre un nuevo principio activo en Lucerna, Suiza, o una compañía de smartphones diseña un nuevo procesador de gráficos en Santa Barbara, California.
Paso 2, El desarrollo: la farmacéutica suiza desarrolla una línea de síntesis del nuevo principio activo y la compañía de smartphones diseña la linea de producción y las máquinas de semiconductores para la producción completa del nuevo procesador.
Paso 3, La manufactura: la farmacéutica suiza implanta la nueva linea de síntesis del nuevo medicamento en una factoría que tiene en Turquía, mientras que la compañía californiana de smartphones despliega la producción del nuevo procesador en una factoría en Shenzhen China
Como se ve, la manufactura es solo una parte del proceso industrial y conlleva solo el 10% del valor económico creado. El consumidor final que compra el nuevo medicamento o el nuevo smartphone, paga con un 10% del precio la manufactura de ese producto y con un 90% el diseño y desarrollo del nuevo producto.
La actividad manufacturera, es una 'actividad fácil' que ocurre en países pobres con salarios bajos como Turquía, China, Tunez o España.
La parte de la actividad industrial que crea valor y que exige capital humano muy formado y muy bien pagado ocurre en los laboratorios de diseño y centros de desarrollo que compañías como la suiza Hoffmann-La Roche tienen en Suiza o que Apple tienen en California.
Los economistas, extrañamente, consideran que la actividad de los centros de desarrollo de Hoffmann-La Roche o de Apple forma parte del sector 'servicios' y son indistinguibles de un bar de playa en una playa de Cádiz, por ejemplo.
España, con mucha suerte, puede aspirar a ser elegido por compañías industriales extranjeras como territorio pobre y con salarios bajos para implantar su actividad manufacturera pero, dada la tendencia a subirse a la parra de los demorados profundos del Gobierno, es más probable que elijan lugares como Polonia o jovenlandia.
Y sí, Iñigo Errejón está de enhorabuena: los españoles van a tener mucho mucho tiempo para participar en política. Creo que no van a tener que trabajar ni siquiera 32 horas a la semana y es posible que no tengan que trabajar ni una sola hora a la semana.