Yo creo que tú eres uno de ellos, y te lo digo de verdad.
En casi todas tus intervenciones destilas un repruebo, una frustración, un resentimiento, y por consiguiente una toxicidad, que no debe ser nada fácil de cargar sobre las espaldas a diario. Tampoco hace falta ser un experto para ver todo eso que te he comentado y mucho más en tus dibujos.
De verdad, no te lo digo para jorobarte, pero tienes unas cuantas cosas ahí atravesadas en la psiquis que te tienen amargado de la vida.
A ver si hay suerte y algún día por alguna razón te cae ese apartamentito luminoso y tan cuco en el centro de Chueca con el que fantaseas día sí y día también y te ayuda a salir Del Pozo de amargura en el que te encuentras, y si te viene con un noviete majo y unos años más joven que tú, que te haga olvidarte del irremisible paso del tiempo, pues mejor que mejor.