Me ha gustado la entrevista y como la ha planteado Ana Pastor, sobre todo porque la ha cagado a base de bien. Se ha escenificado perfectamente el enfrentamiento entre el pensamiento ultraprogre y el de la supuesta "extrema derecha". Los argumentos de Lepen han sido irreprochables y la otra ha tirado de demagogia, y esto ha sido lo bueno, que el pensamiento del tipo Lepen está proscrito en España y no se habla de él en ningún medio si no es para caricaturizarlo y ridiculizarlo (por eso no hay partidos en España que lo defiendan), y gracias a esta entrevista , que seguro que ha tenido una gran audiencia, muchos ciudadanos habrán escuchado por primera vez en muchos años un mensaje sensato y bien construido que está en la mente de millones de Españoles y que no se plasma en ninguna fuerza política.