Vamos, que no criticas lo lógico, que sería que en un puñetero concurso musical lo que se valore sea la música y no la política, sino que criticas que, politizando a tope todo lo que se pueda, esa politización no sea de tu cuerda.
Creo que ni os imagináis hasta qué punto el mundo se está emponzoñando por eso. Estamos convirtiendo absolutamente todo en un ejercicio de política, cuando la política debería estar exclusivamente restringida a un círculo muy pequeño.
Y no, eso no sale bien. En cualquier ambiente donde eso se aplique, termina en desgracias personales. Fíjate por ejemplo, Cataluña; familias en las que los hermanos no se hablan, o amigos de toda la vida que no saben convivir con el hecho tan natural de tener opiniones distintas.
En el momento en que todo es política, todo se convierte en una fruta cosa. En el momento en que ese encuadre 'meta' de que todo deba ser politizado, como decía Maslow terminas teniendo solo un martillo y viendo el mundo como clavos.
Seguramente en tu cabeza eres parte de la solución, pero me temo que no.