Éstos son los tres puntos que deberían compartir en sus programas todas las formaciones post-PPSOE para regenerar nuestro país y llevarlo a ser una potencia económica, industrial y científica.
1. Ilegalización de los partidos PP y PSOE, por delitos de asociación ilícita y alta traición.
2. Inhabilitación vitalicia para la política o militancia política de todos los cargos y afiliados de los anteriores partidos.
3. Auditoría de los contratos y concesiones fraudulentas de obras y servicios públicos. Inhabilitación de por vida a las empresas implicadas para obtener contratos públicos. Si es necesario, expropiación forzosa de dichas compañías.