Los hechos sucedieron sobre las 21.30 horas del pasado domingo, cuando un sobrino de la víctima, desde el balcón, advirtió que uno de los ultras orinaba contra la puerta de la vivienda.
El joven bajó con un cubo de agua y entabló una disputa con los ultras, tras recriminarle su actitud. Pero el grupo reaccionó de forma violenta y persiguió escaleras arriba al joven que logró entrar en el domicilio.
Los ultras, según el relato de la víctima, derribaron a patadas la puerta del domicilio y buscaron por la casa al joven, que se escondió en su cuarto, cuya puerta también patearon.