El crimen 'casi-perfecto' de Anglés: sin huella 20 años después de Alcàsser (V)

Capitán Hidalgus

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Tomide

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En el camino y pasados los años repite el encuentro con el “supuesto” Villarejo, eso es cierto, lo de la maquinaria y lo de Angola, pero se va dejando por el camino detalles como que incluso este llegó a amenazar a sus hijos, cosa que no es baladí o el episodio con el vidente donde Paco Emilio afirma con rotundidad que se trataba de el, estando Don Fernando también presente, y por lo que también me extraña que habiendo manifestado Villarejo en televisión, en una época donde solo existían dos cadenas, que su condición era la de policía incluso erigiéndose como Secretario General de un sindicato policial, el Sr. García pese a tener durante muchos años la oportunidad de difundir este suceso y relacionarlo directamente con las cloacas o cúspides estamentales, teniendo altavoces como el programa de Iker Jiménez, llega a menciona el suceso, pero se le pasa el dato de dar el nombre en directo, que lastima.

No quiero ser mal pensado, quizás es que no es conocedor de que existe el siguiente video porque nadie le ha llegado a profundizar nunca en ese relato.



Pero tengo la sensación de que siempre que trae a colación el suceso de la cafetería de Atocha, lo hace con la intención de crear esa sombra y halo de misterio queriendo apuntar a otras personas para seguir alimentando la conspiración y nada más.

Tiene delante la oportunidad perfecta para afirmar con rotundidad que ese que aparece en las imágenes y con el que se reunió en efecto era Villarejo, de relacionarlo con las cloacas, de manifestar que era enviado por terceras personas que como mínimo podrían ser responsables políticos, de corroborar que desde hace décadas uno de los casos mas mediáticos del país ha intentado ser silenciado, que le han amenazado a el y a sus hijos, intentado que dejara de pelear por conocer la verdad, afianzando que efectivamente existía una conspiración alejada de las tesis oficiales y como resumen, pudiendo ofrecer una primicia que 30 años después arrojaría verdad en los planteamientos que Don Fernando García tuvo durante años.

Demasiado están tardando según que investigadores en ahondar en el tema, hacerle la pregunta o enseñarle las imágenes. Tienen una exclusiva si Fernando con tan solo reconocerlo afirma que se trataba de el.

O realizar aquel directo donde la audiencia podría preguntarle al respecto al bueno de Don Fernando y ya de paso, por la cruz de Caravaca, el pendiente, porque creyó en la autoría/participación de Anglés y demás contradicciones que existen a lo largo del tiempo en su relato.

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Pepe Criminólogo

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En el camino y pasados los años repite el encuentro con el “supuesto” Villarejo, eso es cierto, lo de la maquinaria y lo de Angola, pero se va dejando por el camino detalles como que incluso este llegó a amenazar a sus hijos, cosa que no es baladí o el episodio con el vidente donde Paco Emilio afirma con rotundidad que se trataba de el, estando Don Fernando también presente, y por lo que también me extraña que habiendo manifestado Villarejo en televisión, en una época donde solo existían dos cadenas, que su condición era la de policía incluso erigiéndose como Secretario General de un sindicato policial, el Sr. García pese a tener durante muchos años la oportunidad de difundir este suceso y relacionarlo directamente con las cloacas o cúspides estamentales, teniendo altavoces como el programa de Iker Jiménez, llega a menciona el suceso, pero se le pasa el dato de dar el nombre en directo, que lastima.

No quiero ser mal pensado, quizás es que no es conocedor de que existe el siguiente video porque nadie le ha llegado a profundizar nunca en ese relato.



Pero tengo la sensación de que siempre que trae a colación el suceso de la cafetería de Atocha, lo hace con la intención de crear esa sombra y halo de misterio queriendo apuntar a otras personas para seguir alimentando la conspiración y nada más.

Tiene delante la oportunidad perfecta para afirmar con rotundidad que ese que aparece en las imágenes y con el que se reunió en efecto era Villarejo, de relacionarlo con las cloacas, de manifestar que era enviado por terceras personas que como mínimo podrían ser responsables políticos, de corroborar que desde hace décadas uno de los casos mas mediáticos del país ha intentado ser silenciado, que le han amenazado a el y a sus hijos, intentado que dejara de pelear por conocer la verdad, afianzando que efectivamente existía una conspiración alejada de las tesis oficiales y como resumen, pudiendo ofrecer una primicia que 30 años después arrojaría verdad en los planteamientos que Don Fernando García tuvo durante años.

Demasiado están tardando según que investigadores en ahondar en el tema, hacerle la pregunta o enseñarle las imágenes. Tienen una exclusiva si Fernando con tan solo reconocerlo afirma que se trataba de el.

O realizar aquel directo donde la audiencia podría preguntarle al respecto al bueno de Don Fernando y ya de paso, por la cruz de Caravaca, el pendiente, porque creyó en la autoría/participación de Anglés y demás contradicciones que existen a lo largo del tiempo en su relato.

Ver archivo adjunto 1409433
El sr. Paco Emilio no estuvo en la cafetería de Atocha. Tampoco Juan Ignacio Blanco.

Fernando García estuvo en 1997 en una cafetería de Atocha con un señor que decía que venía de Angola. Y ese señor le presionó.

Evidentemente en 1997 ni Fernando Garcia ni muchos de los que estamos aquí sabía quien era el Sr. Villarejo y a qué se dedicaba.

De 2:18:50 a 2:20:25 Fernando García cita lo de Atocha y lo de Angola.




Las aventuras de Villarejo en Angola




Partiendo del minuto 84:20 de la entrevista a D. Fernando García, se le escucha decir y afirmar que ese señor era Villarejo (transcripción de Demodé en Foro Burbuja 1-11-2020)




En conclusión: Fernando Garcia tiene claro que se trataba de Villarejo y no tengo que ponerlo en duda, máxime con ese testimonio de Canal-9 del lejano 1997 en el que dice lo mismo que en esa entrevista más reciente en IVOOX en 2020, salvando eso sí, que en 1997 ni Fernando García ni muchos de los que estamos aquí sabía quién era Villarejo y hoy ya lo sabe casi todo el mundo.

Por tanto es un poco reiterativo volver a preguntarle lo mismo a Fernando García con la vana esperanza de que de otra respuesta.

A quien habría que preguntarle (y eso usted no lo dice) y mejor en alguna sesión parlamentaria, sería al sr. Villarejo.

O, mejor, en alguna conversación privada y grabarle, como acostumbra y acostumbraba hacer el mismo Villarejo.

Las preguntas a Villarejo podrían ir de esta guisa:

1. ¿Quién le ordenó entrevistarse con Fernando García?
2. ¿Qué objetivo perseguía usted y sus ordenantes con aquella entrevista?
3. ¿Es cierto que le presionó?
4. ¿Cuál es su opinión sobre el caso Alcàsser?
 

TheTaxiDriver

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El sr. Paco Emilio no estuvo en la cafetería de Atocha. Tampoco Juan Ignacio Blanco.

Fernando García estuvo en 1997 en una cafetería de Atocha con un señor que decía que venía de Angola. Y ese señor le presionó.

Evidentemente en 1997 ni Fernando Garcia ni muchos de los que estamos aquí sabía quien era el Sr. Villarejo y a qué se dedicaba.

De 2:18:50 a 2:20:25 Fernando García cita lo de Atocha y lo de Angola.




Las aventuras de Villarejo en Angola




Partiendo del minuto 84:20 de la entrevista a D. Fernando García, se le escucha decir y afirmar que ese señor era Villarejo (transcripción de Demodé en Foro Burbuja 1-11-2020)




En conclusión: Fernando Garcia tiene claro que se trataba de Villarejo y no tengo que ponerlo en duda, máxime con ese testimonio de Canal-9 del lejano 1997 en el que dice lo mismo que en esa entrevista más reciente en IVOOX en 2020, salvando eso sí, que en 1997 ni Fernando García ni muchos de los que estamos aquí sabía quién era Villarejo y hoy ya lo sabe casi todo el mundo.

Por tanto es un poco reiterativo volver a preguntarle lo mismo a Fernando García con la vana esperanza de que de otra respuesta.

A quien habría que preguntarle (y eso usted no lo dice) y mejor en alguna sesión parlamentaria, sería al sr. Villarejo.

O, mejor, en alguna conversación privada y grabarle, como acostumbra y acostumbraba hacer el mismo Villarejo.

Las preguntas a Villarejo podrían ir de esta guisa:

1. ¿Quién le ordenó entrevistarse con Fernando García?
2. ¿Qué objetivo perseguía usted y sus ordenantes con aquella entrevista?
3. ¿Es cierto que le presionó?
4. ¿Cuál es su opinión sobre el caso Alcàsser?
A mi personalmente, lo que me extraña de todas estas anécdotas de acoso y presión, es, que atendiendo a los diferentes testimonios de Paco Emilio y Fernando García, podemos situarlas en torno a finales de 1996 y principios de 1997.

Según Paco Emilio, él está convencido de que el señor con boina y gafas que les invitó a la sesión de espiritismo y que dijo haber visto las cintas de las autopsias de las niñas de Alcàsser era el comisario Villarejo (afirmación a raíz de un ‘déjà vu’ tras verlo en televisión años después).

Según Fernando García, él cree que el hombre que lo citó en Atocha se trataba de Villarejo (seguramente a raíz también de hacerse pública la voz, la imagen y el curriculum del comisario en televisión años después). Sin embargo, a Fernando García le cuesta recordar al señor con boina que les invitó a la sesión de espiritismo.

Si ambas anécdotas ocurrieron casi seguidas, en el mismo periodo de tiempo, ¿no debería Fernando García haber reconocido en Atocha a esa persona, al habérsela encontrado, supuestamente, en dos momento distintos, continuados en el tiempo?

O bien se trató de dos personas distintas, o Fernando García no prestó demasiada atención al hombre con boina de la sesión de espiritismo.
 

Aresti

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Encontrarse con Villarejo es como encontrarte con vlad o Ana capri.

Es posible que trabajase para el gobierno pero también es cierto que el tío trabaja para si mismo creando el mismo los líos y el caos para sacar tajada.
 

Pepe Criminólogo

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A mi personalmente, lo que me extraña de todas estas anécdotas de acoso y presión, es, que atendiendo a los diferentes testimonios de Paco Emilio y Fernando García, podemos situarlas en torno a finales de 1996 y principios de 1997.

Según Paco Emilio, él está convencido de que el señor con boina y gafas que les invitó a la sesión de espiritismo y que dijo haber visto las cintas de las autopsias de las niñas de Alcàsser era el comisario Villarejo (afirmación a raíz de un ‘déjà vu’ tras verlo en televisión años después).

Según Fernando García, él cree que el hombre que lo citó en Atocha se trataba de Villarejo (seguramente a raíz también de hacerse pública la voz, la imagen y el curriculum del comisario en televisión años después). Sin embargo, a Fernando García le cuesta recordar al señor con boina que les invitó a la sesión de espiritismo.

Si ambas anécdotas ocurrieron casi seguidas, en el mismo periodo de tiempo, ¿no debería Fernando García haber reconocido en Atocha a esa persona, al habérsela encontrado, supuestamente, en dos momento distintos, continuados en el tiempo?

O bien se trató de dos personas distintas, o Fernando García no prestó demasiada atención al hombre con boina de la sesión de espiritismo.
Coincido en tu apreciación, pero creo que el test es sencillo.

En ese tocho de vídeo de Canal-9, Fernando Garcia también hace referencia al "montaje" del medium extranjero, la mujer y el señor X aludido, pero en ese mismo vídeo, Fernando García, que narra esos dos hechos, no dice en ningún momento que el señor X de la sesión de espiritismo sea el mismo que el señor de Atocha.

¿A quién creemos, al que sólo estuvo en uno de los hechos y no puede comparar, o al que estuvo en los dos hechos y puede comparar?
 
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Pepe Criminólogo

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TheTaxiDriver

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Villarejo: "He trabajado para diez ministros de Interior". Justo van diez, de Corcuera (1989) a Fernández Díaz (2016).

Por no hablar de su colaboración y participación en la elaboración de dossieres, a raíz de la detención de Mozer Al Kassar, donde recogió una trama supuestamente urdida por el comisario Alberto Elías, el juez Garzón y la relación de éstos con narcotraficantes y “grupos de poder” que supuestamente corrompían y controlaban a distintos políticos, jueces, empresarios, periodistas y policías.

‘Informe Veritas’, lo llamaron. Y su elaboración, se dice, comenzó en 1994, poco después de extraerse de una caja de seguridad del Banco Sabadell —la que pertenecía al juzgado de Alzira— la cinta de las autopsias de las niñas de Alcàsser.

Recopilación de interés:

 

terro6666

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La clave está en el momento que Ricart dice que estaba en la guandoca , llaman por teléfono y les dicen que si, que estaba en la guandoca.
Porque coge el coche el sargento y se va a Picassent?, Quién hubiera hecho eso?.
 

Tomide

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La clave está en el momento que Ricart dice que estaba en la guandoca , llaman por teléfono y les dicen que si, que estaba en la guandoca.
Porque coge el coche el sargento y se va a Picassent?, Quién hubiera hecho eso?.
Cuando Ricart empieza a construir una coartada donde afirma que estaba en prisión, nombra e involucra a la que por aquel entonces el dice que era su novia, María Dolores Cuadrado, atribuyéndole que mientras el estaba en prisión, ella era la que quedo en posesión del Corsa, cosa que María Dolores corroboró que era mentira y además, una vez Ricart detenido, desea que le pasen aviso a esta, donde desde la comandancia la llaman para ello e incluso hablando con diferentes agentes previamente a hablar con Ricart, era cuestión de horas que la que según era su novia le desmontara la coartada a preguntas de cualquier agente.

Que se desplazaran a Picassent puede ser fruto de comprobar dicho extremo, tenían a Ricart que decía que estaba en prisión, extremo que confirman telefónicamente desde esta, pero sin aporte documental alguno, y luego a la que es la madre de su hija diciendo lo contrario, lo más rápido y que despejaría toda duda es presentarse allí y ver el expediente, cosa que hicieron.

Quizás se esperaba que la que el decía que era su novia apoyara dicha coartada, cosa que no sucedió.
Curioso también que 30 años después le pregunten donde se encontraba ese 13 de Noviembre, y no mantenga aquella mentira de que se encontraba en prisión, ni tampoco se acuerde de lo que estaba haciendo ese día, es más, en esta ultima entrevista incluso reconoce que por la proximidad de las fechas, tampoco lo recuerda si se encontraba en prisión o no, una cabeza de turco, sin duda alguna.

A partir del min. 11.11



Un saludo.