Una noche acabamos en la casa de una lesbiana que yo no conocía. Estoy hablando hace 20 años. La mujer que no me cae bien abrió la puerta del piso y soltó lo típico de "está un poco desordenado..."
me siento amigablemente en el WC mientras pienso en la leche, eso era un puñetero piso de diógenes. cosa por todos lados, sarama literalmente tirada por el suelo, papeles, botes de cerveza... en la cocina una pila de platos y cubiertos por lavar, que luego me dijeron que tenía el fregadero atascado. El olor en general era da repelúsnte.
Dos detalles:
En el aseo había una olla, una fruta olla, con los restos de un cocido o algo similar de hace 2 semanas mínimo. Pensaba que era de pota o algo así, y va y suelta la muy juca que le gusta cocinar y que se le da muy bien, pero que luego le da pereza limpiar. Que la olla la ha dejado para meterla en la ducha, y yo cagándome en su querida progenitora.
El que supuestamente era su dormitorio era una habitación con la persiana rota, permanentemente bajada (dice la tía: "total si es que sólo vengo a dormir"), el colchón tirado en el suelo sin sábanas, el somier por otro lado, con toda la ropa tirada en un rincón, y lo más alucinante es que se le había fundido la bombilla (acordaos que la persiana estaba rota) y la muy astuta por no cambiar la luz entraba y salía con UNA LINTERNA que tenía colgada del picaporte. Os juro que esa habitación era de película de estas de Saw o algo así.
Parecía el piso de trainspotting, no he visto en mi vida nada igual, y supuestamente era una "persona normal". No sé qué habrá sido de esa tía, supongo que llevará algo menos de dos décadas muerta en el colchón ese poco agradable.