Normal, los primeros que ralentizan el proceso son los jefes. Ya sea porque cuesta sacar el trabajo, por desconocimiento o por tocarse la huevada. En todas partes hay días de no parar y días totalmente perdidos.Esto es lo que no entendemos bien. No debería haber tiempo de "no hay nada que hacer". Si el jefe se entera podrá reestructurar la empresa o iniciar nuevos proyectos, pero como piensa que no tenemos tiempo, ni se lo plantea. Al final todo se une y perdemos cantidad de productividad que terminamos pagando todos, empresarios y trabajadores.
Claro, que necesitamos buenos jefes para esto. Si es del perfil explotador lo que hará será despedir o reducir jornadas, seguramente.
Al final todos ponemos nuestro granito de arena para que las empresas sean un desastre.