Fmercury1980
Madmaxista
- Desde
- 27 Mar 2007
- Mensajes
- 5.642
- Reputación
- 17.689
Creo que Exilium y Prada erran sus razonamientos en el siguiente punto:
Prada afirma que la crisis en la construcción no afectará al consumo mientras no suba el paro. Esto es una contradicción en sí mismo, puesto que en los últimos años el 40% del empleo lo ha generado directamente la construcción. Y si hay una ralentización en la actividad constructora el resultado será la destrucción de empleo no sólo en el ramo de la construcción sino también en todas aquellas ramas de la industria que dependen en buena medida de ella (ya sabéis, rejas de hierro, aluminio para las ventanas, muebles para las viviendas nuevas, espejos y cristales, cerámica para los ladrillos, etc...).
Los datos son los siguientes, y son incontrastables: En el año 2006 se visaron 850.000 viviendas nuevas y sin embargo sólo se inscribieron en el Registro unas 390.000. Con el agravante de que este último número sigue descendiendo por la saturación del nivel de ahorro de las familias y, sobre todo, por la presión del Euribor.
Si el nivel de construcción (que en estos momentos tiene un volumen de negocio similar al de Alemania, Francia e Italia juntas, y a la mitad del de Estados Unidos) desciende a los niveles de oferta....¿acaso no se produciría un incremento brutal del paro y una recesión en el consumo?
Recordad esta máxima: Por cada vivienda que se deje de construir se destruyen dos o tres empleos.
Prada afirma que la crisis en la construcción no afectará al consumo mientras no suba el paro. Esto es una contradicción en sí mismo, puesto que en los últimos años el 40% del empleo lo ha generado directamente la construcción. Y si hay una ralentización en la actividad constructora el resultado será la destrucción de empleo no sólo en el ramo de la construcción sino también en todas aquellas ramas de la industria que dependen en buena medida de ella (ya sabéis, rejas de hierro, aluminio para las ventanas, muebles para las viviendas nuevas, espejos y cristales, cerámica para los ladrillos, etc...).
Los datos son los siguientes, y son incontrastables: En el año 2006 se visaron 850.000 viviendas nuevas y sin embargo sólo se inscribieron en el Registro unas 390.000. Con el agravante de que este último número sigue descendiendo por la saturación del nivel de ahorro de las familias y, sobre todo, por la presión del Euribor.
Si el nivel de construcción (que en estos momentos tiene un volumen de negocio similar al de Alemania, Francia e Italia juntas, y a la mitad del de Estados Unidos) desciende a los niveles de oferta....¿acaso no se produciría un incremento brutal del paro y una recesión en el consumo?
Recordad esta máxima: Por cada vivienda que se deje de construir se destruyen dos o tres empleos.