Yo no dejaria mi fortuna a un gato, pero a los "pobres" (tanos, refuyies, lumpen guarro, extranjeros que se cagan en españa, etc) no les dejaba una cosa tampoco.
Eso está claro. O que te la hubiesen dejado a ti incluso. Pero a un gato es una ofensa y un insulto para cualquiera que no se haya convertido en un zombi sin sentido común.
Veamos un momento...
1) La gata es una belleza.
2) Obviamente el propietario de una mascota puede tomar las medidas para que la misma viva "ricamente". Tiene derecho a eso si se ganó su dinero trabajando. Nadie se lo discute.
3) El problema de fondo es más bien "conceptual".
Una cosa es dejar una previsión LOGICA para una mascota (yo lo haría con la mía por cierto) y otra demostrar
una total falta de EMPATIA CON EL GENERO HUMANO.
No hace falta dejarle el dinero "a los tanos o lumpen" que no le gustan a
Davitín. Lo puedes dejar para los huérfanos de españoles que hoy están en orfanatos. Lo puedes dejar a organizaciones que cuidan a los animales. Lo puedes dejar a una Fundación para que construya casas para las familias pobres... hay MILES de opciones que demuestran tu sentido común, tu amor "por el otro" y tu compromiso social.
Ninguna de esas cosas están presentes si alguien deja 150 millones a un gato como único destino de sus fondos.
La prensa, bien pudo titular la noticia como
"Demente Falto de Empatía Social deja todo a su gato" y yo me hubiera quedado tranquilo... significaría que, existen dementes pero existe sentido comunitario por parte de la prensa.
También me parece muy positivo que muchos en este hilo piensen igual.
Me apena vivir en una sociedad de orates insensibles (no todos lo son por cierto). Una sociedad donde los políticos "socialistas" cuando les llega el momento escupen a sus seguidores y se compran un casoplón en Galapagar o donde un tío que disfrutó de las mieles de la abundancia capitalista, cuando se muere es INCAPAZ de dejar un mundo mejor del que encontró y, en vez de atender a huérfanos, viudas y desvalidos, va y le deja todo al gato.
Me quedo con lo que hizo
Bill Gates que, incluso en vida, le armó un fideicomiso de 10 millones al hijo (más que suficiente), se dejó unos centavos para vivir a cuerpo de rey (no hay problemas, se ganó su dinero) y el resto lo está usando para mejorar al mundo.