Una vez tuve que salir corriendo a parar un coche, al que se le soltó el freno de mano. Seguramente fué por la resonancia que produjera mi coche diesel.
Y un amigo me contó que una vez se le soltó el freno de mano, y le pusieron una multa, y tuvo que llevárselo la grúa, porque quedó en medio de la calle, obstruyendo el paso. Me dijo que la culpa era de su mujer, que se quejaba de que dejara el coche con la primera metida.
Moraleja, los frenos de mano los suelta el diablo. Y eran de palanca, que no existían esos que decís de botón que no los he llegado a ver.