Un cohete chino y un satélite ruso sin control pueden chocar esta noche a 53.000 kilómetros por hora
La colisión de las dos piezas de basura espacial, que suman un peso de tres toneladas, podría generar una nube de cientos de pequeños escombros
Actualizado:15/10/2020 15:55h Guardar
4
Un antiguo
cohete chino a la deriva y un
satélite militar ruso sin control pasarán esta noche a unos cercanísimos
12 metros el uno del otro, según informa el servicio de rastreo de basura espacial
LeoLabs. El encuentro sucederá a la 1.56 hora peninsular española, ya en la madrugada del viernes, y podría acabar en una gran colisión. El organismo advierte de que existe una
probabilidad superior al 10% de que ambos objetos choquen a una altitud de 991 kilómetros sobre el
mar de Weddell, justo al lado de la Península Antártica.
Se trata de dos cuerpos con una masa considerable y una rapidez de infarto: entre los dos suman casi tres toneladas y viajan a una velocidad de 14,7 kilómetros por segundo (unos 53.000 kilómetros por hora). En concreto, la etapa del cohete varada es parte de un cohete
Long March 4B lanzado el
10 de mayo de 1999. El otro objeto implicado es un
satélite militar ruso Parus, que pesa alrededor de 825 kilogramos y que fue lanzado el 22 de febrero de 1989 para comunicaciones y navegación, si bien ya no se encuentra operativo, por lo que
no es posible comunicarse con él y desviar su trayectoria para evitar el choque.
We are monitoring a very high risk conjunction between two large defunct objects in LEO. Multiple data points show miss distance <25m and Pc between 1% and 20%. Combined mass of both objects is ~2,800kg.
Object 1: 19826
Object 2: 36123
TCA: Oct 16 00:56UTC
Event altitude: 991km
pic.twitter.com/6yWDx7bziw
— LeoLabs, Inc. (@LeoLabs_Space)
October 13, 2020
«Esta es probablemente una de las peores colisiones accidentales que hemos visto desde hace tiempo», explica para el portal
ScienceAlert la arqueóloga espacial
Alice Gorman, de la Universidad Flinders en Australia.
Los ingenieros de LeoLab han simulado la ruta de ambos cuerpos, que literalmente se «rozarán» a casi 1.000 kilómetros sobre nuestras cabezas:
1/ This event continues to be very high risk and will likely stay this way through the time of closest approach. Our system generates new conjunction reports 6-8x per day on this event with new observation data each time.
pic.twitter.com/d3tRbcV2P0
— LeoLabs, Inc. (@LeoLabs_Space)
October 14, 2020
Sin riesgos para la Tierra (a corto plazo)
No es la primera vez que ocurre un episodio parecido este año. En enero,
dos antiguos satélites a la deriva pasaron a una distancia de entre 15 y 30 metros entre sí, con una probabilidad de colisión de uno entre cien. En esa ocasión, ambos se cruzaron sin provocarse ningún daño.
En esta ocasión, las probabilidades aumentan, si bien los expertos confirman que
no hay riesgo para nosotros en la Tierra, ni en el caso en el que el fatal desenlace se cumpla: se crearía una lluvia de pequeños escombros que acabaría desintegrada en la atmósfera. «Todavía no podemos eliminar de forma activa escombros espaciales como estos, así que estarán presentes un tiempo. Sin embargo, a una altitud de unos 1.000 kilómetros, este material no entrará por entero en la atmósfera en cuestión de semanas o meses, por lo que seguramente permanezca bastante tiempo», explica Gorman.
El síndrome de Kessler
Aunque de momento la tasa de colisiones entre basura espacial es muy pequeña, existe una teoría preocupante acerca de lo que puede pasar en el futuro llamada «
síndrome de Kessler». Se trata de una hipótesis creada por el astrofísico de la NASA
Donald Kessler en 1978, en la que se afirma que con una gran cantidad de
escombros en el espacio, en un momento dado habrá una cascada de colisiones descontrolada que provocarán que el espacio cercano a la órbita de la Tierra quede impracticable. «
Todavía no estamos en ese punto, ¿pero cuánto tiempo nos queda hasta llegar a él?», se pregunta Gorman.
1/ This event continues to be very high risk and will likely stay this way through the time of closest approach. Our system generates new conjunction reports 6-8x per day on this event with new observation data each time.
pic.twitter.com/d3tRbcV2P0
— LeoLabs, Inc. (@LeoLabs_Space)
October 14, 2020
Aunque el impacto es el peor de los escenarios, la presencia de escombros en el espacio sigue siendo un problema. Por ello, las
agencias espaciales están trabajando en diferentes proyectos para encontrar soluciones no solo para dejar de generar basura espacial, sino para acabar con la ya existente. «Siento que probablemente no sucederá la colisión, soy optimista. Pero habrá que esperar. Crucemos los dedos», concluye Gorman.
Un cohete chino y un satélite ruso sin control pueden chocar esta noche a 53.000 kilómetros por hora
Estaré despierto a esa hora, ¿abriré la sidra? Supuestamente no es el fin del mundo, eso si no nos han mentido y sea algo rellenito. ¿Ese posible choque jorobaría otros satélites? En un rato lo veremos pero no espero nada. Quedan horas para el 16 de octubre OMG.
Edito:
Síndrome de Kessler - Wikipedia, la enciclopedia libre
Interesante