Allah Akbar. Qatarluña mas cerca

Catalanes votantes:
- El hombre es muy malo
- El español es muy malo
- La gente de jovenlandia es muy buena

Madrileños votantes:
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¿Dónde está Wally?

1, 2, 3 responda otra vez
Aquí está Wally

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La unica forma es expulsar a todo jovenlandes a su puñetero país, ni los pocos muslim europeos autóctonos se integraron, menos sucederá con jovenlandeses de otras razas ajenas a Europa.
a estas alturas eso parece un sueño irrealizable, al final acabaremos con una guerra civil por culpa estos gente de izquierdas empobrecedores
 
a estas alturas eso parece un sueño irrealizable, al final acabaremos con una guerra civil por culpa estos gente de izquierdas empobrecedores
Limpiezas étnicas siempre hubo y habrá en Europa, hace poco tuvimos una en los Balcanes.

Eso hay que agradecer a los progres de cosa.
 
Y cómo se gestiona eso de tener en la misma clase una asignatura de religion islamica a la vez que les dan charlas feministas, LGTBI, trans y demás degeneración nwo? Pillo palomitas. Preveo cortocircuitos entre Rachid el mena y Claudia la profesora de inclusion de genaro
 
Y cómo se gestiona eso de tener en la misma clase una asignatura de religion islamica a la vez que les dan charlas feministas, LGTBI, trans y demás degeneración nwo? Pillo palomitas. Preveo cortocircuitos entre Rachid el mena y Claudia la profesora de inclusion de genaro
Pues a los jovenlandeses se les excluirá de esas clases, esas son para gaiizar a los blanquitos occidentales para que no puedan defenderse de la guano marrónida.
 
Y cómo se gestiona eso de tener en la misma clase una asignatura de religion islamica a la vez que les dan charlas feministas, LGTBI, trans y demás degeneración nwo? Pillo palomitas. Preveo cortocircuitos entre Rachid el mena y Claudia la profesora de inclusion de genaro

acaba con la profe amada sin consentimiento por Rachid, y ésta callada por miedo a que el pobre Rachid reciba represalias, pobre ser de luz, el problema es de la sociedad y del hombre blanco opresor
 
Para mí el problema no es que los emigrantes extraeuropeos sean de otra razas o étnias, sino que por acumulación de peso demográfico (que se hagan mayoritarios y en base a ello dominantes, ganen elecciones, etc.) grupos integristas de alguna religión puedan socavar en alguna medida el laicismo. Que es una una de las grandes conquistas de la Ilustración y de la Revolución Francesa y que entiendo debería ser uno de los pilares de una sociedad libre.

Dicho de otra manera, es el librepensamiento lo que hay que salvar, más que la una religión cristiana o una raza blanca, que en un futuro no muy lejano tanto aquí como en Francia o en Holanda o en Gran Bretaña van a perder mucha presencia de forma inevitable en las próximas décadas.

Es algo imparable hoy por hoy con nuestro sistema productivo capitalista y de familia.
Hay trabajos que los locales no quieren hacer por el precio perversos y en las condiciones de precariedad que ofrecen los empresarios, pero los no locales sí están dispuestos.

La natalidad o fecundidad de las parejas locales es escasa, pero la de los recien llegados es muy alta.
Esto último siempre me ha sorprendido. Porque los emigrantes extraeuropeos son por lo general las clases bajas y tienen menos recursos económicos. Y a los hijos, a los niños, una vez se tienen hay que alimentarlos, comprarles ropa, juguetes, material escolar y muchas cosas más, lo que incrementa en gran medida los gastos para esas familias. ¿Cómo es que los que menos tienen son los que cargan con esos mayores gastos que las parejas con un hijo o sin hijos?
Las parejas europeas sulen ser más inestables en términos generales, abundan los divorcios, separaciones y promiscuidades varias. En cambio las parejas extraeuropeas suelen ser más sólidas, más tradicionales y no sé si más felices. Probablemente porque las mujeres se conforman más con su función de madres/amas de casas y poco más que las europeas.

A mí me parece lógico y comprensible y respetable que un de la religión del amor quiera enseñar su religión a sus hijos. Cada padre y progenitora quieren enseñar a sus hijos lo que entienden son valores positivos. Que nosotros no los veamos tan positivos es otro tema (a mí personalmente no me gusta mayormente la religión islámica, aunque deberíamos matizar, no todos los fiel a la religión del amores son iguales y del mismo modo que en el cristianismo existen muchos matices), pero haciendo un pequeño esfuerzo mental podemos entender que para ellos se trata de enseñarles algo que consideran que es bueno.

Lo que habría que evitar y aquí sí que quiero manifestar mi oposición sería una religión enseñada en plan integrista o supremacista, intolerante o despectiva para con otras religiones o formas de entender la vida diferentes. Pero los integristas en Europa son minoría hoy por hoy. La mayoría de los fiel a la religión del amores europeos conviven y respetan que sus vecinos tengan otras creencias u otras formas de vivir diferentes a las suyas. Los que llegan a radicalizarse demasiado y volverse peligrosos son muy pocos, aunque por lo sangrantes llamen en gran medida la atención.

Cuando veo unx morx joven en la calle yo no veo sistemáticamente a un terrorista o a un violador o un invasor de antemano. Veo a quien me va a pagar la jubilación cuando yo me jubile. Porque sin él/ella, en nuestro sistema productivo, los europeos mayores no tendríamos jubilaciones y no hay suficientes jóvenes locales para mantener la economía en las mismas precarias condiciones (échales si quieres la culpa a los empresarios buitres que se aprovechan de su necesidad).

La alternativa x otro lado es: mayor natalidad y estabilidad familiar de los locales y que los extraeuropeos tengan más oportunidades en sus lugares origen y no se vean forzados a emigrar para intentar mejorar su nivel de vida.

Es como cuando Trump habla despectivamente de los mexicanos hispanohablantes que cruzan la fronteras por el sur de los USA, si mágicamente desaparecieran, ¿quién iba a limpiar los platos sucios en la trastienda de los restaurantes propiedad de los WASP? Si desaparecieran, con ellos tendrían que desaparecer esos restaurantes. En Europa algo similar pasa con los jovenlandeses y los neցros.
 
Para mí el problema no es que los emigrantes extraeuropeos sean de otra razas o étnias, sino que por acumulación de peso demográfico (que se hagan mayoritarios y en base a ello dominantes, ganen elecciones, etc.) grupos integristas de alguna religión puedan socavar en alguna medida el laicismo. Que es una una de las grandes conquistas de la Ilustración y de la Revolución Francesa y que entiendo debería ser uno de los pilares de una sociedad libre.

Dicho de otra manera, es el librepensamiento lo que hay que salvar, más que la una religión cristiana o una raza blanca, que en un futuro no muy lejano tanto aquí como en Francia o en Holanda o en Gran Bretaña van a perder mucha presencia de forma inevitable en las próximas décadas.

Es algo imparable hoy por hoy con nuestro sistema productivo capitalista y de familia.
Hay trabajos que los locales no quieren hacer por el precio perversos y en las condiciones de precariedad que ofrecen los empresarios, pero los no locales sí están dispuestos.

La natalidad o fecundidad de las parejas locales es escasa, pero la de los recien llegados es muy alta.
Esto último siempre me ha sorprendido. Porque los emigrantes extraeuropeos son por lo general las clases bajas y tienen menos recursos económicos. Y a los hijos, a los niños, una vez se tienen hay que alimentarlos, comprarles ropa, juguetes, material escolar y muchas cosas más, lo que incrementa en gran medida los gastos para esas familias. ¿Cómo es que los que menos tienen son los que cargan con esos mayores gastos que las parejas con un hijo o sin hijos?
Las parejas europeas sulen ser más inestables en términos generales, abundan los divorcios, separaciones y promiscuidades varias. En cambio las parejas extraeuropeas suelen ser más sólidas, más tradicionales y no sé si más felices. Probablemente porque las mujeres se conforman más con su función de madres/amas de casas y poco más que las europeas.

A mí me parece lógico y comprensible y respetable que un de la religión del amor quiera enseñar su religión a sus hijos. Cada padre y progenitora quieren enseñar a sus hijos lo que entienden son valores positivos. Que nosotros no los veamos tan positivos es otro tema (a mí personalmente no me gusta mayormente la religión islámica, aunque deberíamos matizar, no todos los fiel a la religión del amores son iguales y del mismo modo que en el cristianismo existen muchos matices), pero haciendo un pequeño esfuerzo mental podemos entender que para ellos se trata de enseñarles algo que consideran que es bueno.

Lo que habría que evitar y aquí sí que quiero manifestar mi oposición sería una religión enseñada en plan integrista o supremacista, intolerante o despectiva para con otras religiones o formas de entender la vida diferentes. Pero los integristas en Europa son minoría hoy por hoy. La mayoría de los fiel a la religión del amores europeos conviven y respetan que sus vecinos tengan otras creencias u otras formas de vivir diferentes a las suyas. Los que llegan a radicalizarse demasiado y volverse peligrosos son muy pocos, aunque por lo sangrantes llamen en gran medida la atención.

Cuando veo unx morx joven en la calle yo no veo sistemáticamente a un terrorista o a un violador o un invasor de antemano. Veo a quien me va a pagar la jubilación cuando yo me jubile. Porque sin él/ella, en nuestro sistema productivo, los europeos mayores no tendríamos jubilaciones y no hay suficientes jóvenes locales para mantener la economía en las mismas precarias condiciones (échales si quieres la culpa a los empresarios buitres que se aprovechan de su necesidad).

La alternativa x otro lado es: mayor natalidad y estabilidad familiar de los locales y que los extraeuropeos tengan más oportunidades en sus lugares origen y no se vean forzados a emigrar para intentar mejorar su nivel de vida.

Es como cuando Trump habla despectivamente de los mexicanos hispanohablantes que cruzan la fronteras por el sur de los USA, si mágicamente desaparecieran, ¿quién iba a limpiar los platos sucios en la trastienda de los restaurantes propiedad de los WASP? Si desaparecieran, con ellos tendrían que desaparecer esos restaurantes. En Europa algo similar pasa con los jovenlandeses y los neցros.

Se va a leer el tocho tu querida progenitora.

¿Quieres dejar de ser tan lgtb?
 
Para mí el problema no es que los emigrantes extraeuropeos sean de otra razas o étnias, sino que por acumulación de peso demográfico (que se hagan mayoritarios y en base a ello dominantes, ganen elecciones, etc.) grupos integristas de alguna religión puedan socavar en alguna medida el laicismo. Que es una una de las grandes conquistas de la Ilustración y de la Revolución Francesa y que entiendo debería ser uno de los pilares de una sociedad libre.

Dicho de otra manera, es el librepensamiento lo que hay que salvar, más que la una religión cristiana o una raza blanca, que en un futuro no muy lejano tanto aquí como en Francia o en Holanda o en Gran Bretaña van a perder mucha presencia de forma inevitable en las próximas décadas.

Es algo imparable hoy por hoy con nuestro sistema productivo capitalista y de familia.
Hay trabajos que los locales no quieren hacer por el precio perversos y en las condiciones de precariedad que ofrecen los empresarios, pero los no locales sí están dispuestos.

La natalidad o fecundidad de las parejas locales es escasa, pero la de los recien llegados es muy alta.
Esto último siempre me ha sorprendido. Porque los emigrantes extraeuropeos son por lo general las clases bajas y tienen menos recursos económicos. Y a los hijos, a los niños, una vez se tienen hay que alimentarlos, comprarles ropa, juguetes, material escolar y muchas cosas más, lo que incrementa en gran medida los gastos para esas familias. ¿Cómo es que los que menos tienen son los que cargan con esos mayores gastos que las parejas con un hijo o sin hijos?
Las parejas europeas sulen ser más inestables en términos generales, abundan los divorcios, separaciones y promiscuidades varias. En cambio las parejas extraeuropeas suelen ser más sólidas, más tradicionales y no sé si más felices. Probablemente porque las mujeres se conforman más con su función de madres/amas de casas y poco más que las europeas.

A mí me parece lógico y comprensible y respetable que un de la religión del amor quiera enseñar su religión a sus hijos. Cada padre y progenitora quieren enseñar a sus hijos lo que entienden son valores positivos. Que nosotros no los veamos tan positivos es otro tema (a mí personalmente no me gusta mayormente la religión islámica, aunque deberíamos matizar, no todos los fiel a la religión del amores son iguales y del mismo modo que en el cristianismo existen muchos matices), pero haciendo un pequeño esfuerzo mental podemos entender que para ellos se trata de enseñarles algo que consideran que es bueno.

Lo que habría que evitar y aquí sí que quiero manifestar mi oposición sería una religión enseñada en plan integrista o supremacista, intolerante o despectiva para con otras religiones o formas de entender la vida diferentes. Pero los integristas en Europa son minoría hoy por hoy. La mayoría de los fiel a la religión del amores europeos conviven y respetan que sus vecinos tengan otras creencias u otras formas de vivir diferentes a las suyas. Los que llegan a radicalizarse demasiado y volverse peligrosos son muy pocos, aunque por lo sangrantes llamen en gran medida la atención.

Cuando veo unx morx joven en la calle yo no veo sistemáticamente a un terrorista o a un violador o un invasor de antemano. Veo a quien me va a pagar la jubilación cuando yo me jubile. Porque sin él/ella, en nuestro sistema productivo, los europeos mayores no tendríamos jubilaciones y no hay suficientes jóvenes locales para mantener la economía en las mismas precarias condiciones (échales si quieres la culpa a los empresarios buitres que se aprovechan de su necesidad).

La alternativa x otro lado es: mayor natalidad y estabilidad familiar de los locales y que los extraeuropeos tengan más oportunidades en sus lugares origen y no se vean forzados a emigrar para intentar mejorar su nivel de vida.

Es como cuando Trump habla despectivamente de los mexicanos hispanohablantes que cruzan la fronteras por el sur de los USA, si mágicamente desaparecieran, ¿quién iba a limpiar los platos sucios en la trastienda de los restaurantes propiedad de los WASP? Si desaparecieran, con ellos tendrían que desaparecer esos restaurantes. En Europa algo similar pasa con los jovenlandeses y los neցros.

España será católica o no será, de momento vamos por la segunda opción, tenéis que elegir.
 
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