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El 27 de Enero de 1993, por la mañana y temprano, dos apicultores de Llombai (Valencia) se disponían a "ver" sus colmenas una fría mañana de Enero... y decimos a "ver", porque que sepamos en pleno invierno las abejas no están para hacer/ofrecer mucha miel.
¿Cómo es posible que 2 veinteañeros como Ricart y Anglés ejercieran un sadismo propio de hombres maduros y alicaídos?
Lo que yo me pregunto es, en caso de que realmente los autores fueran peces rellenitos, si saliera a la luz la verdad y el crimen hubiese prescrito: ¿Qué haríamos la sociedad civil? ¿Actuaríamos? ¿Iríamos como locos a por los señalados culpables? Yo, la verdad, no sé qué pasaría, pero espero que en ese hipotético caso la sociedad despertase.
Todo lo demás, vale. ¿Pero eso? Ahí la has cagado. El sadismo y esa degeneración no es propia de "hombres maduros", ni de nadie normal. O, dicho de otro modo, puede ser propia de "cualquiera", medido en términos de edad.
Repito que hay una serie de afirmaciones rotundas que son la dinámica de las lesiones y las lesiones que tienen los cadáveres. Pero yo creo que la medicina legal debe ir al mas allá para ayudar a la Justicia y a la Policía que directamente ayuda a la Justicia para la identificación de los autores. Verán. En medicina todos sabemos que lesiones que tiene un cadáver a veces deja la impronta del sello de su autor, máxime si se hace una investigación y son crímenes inmotivados. Entonces en medicina legal se sabe por ejemplo que determinadas lesiones, determinado ensañamiento, determinada metódica de actuación del autor, pues tiene digamos la correspondencia muy probable a un enfermo mental, por ejemplo. Entonces ¿que pasa?, que porque no tenga la certeza absoluta de cual es su autor ¿se tiene que callar?. No, entonces aporta este dato para que sea útil a la Justicia ya que ello facilitaría la investigación de la Policía.
Bueno pues en este caso concreto nosotros vemos o nosotros, y esto repito en el terreno de nuestras consideraciones que pueden ser diferentes y muy respetuosas por otros peritos vemos las siguientes manos. Vemos desde luego la mano de la persona que realiza una agresión sensual, separando los muslos de las víctimas, eso quede claro la mano de una persona. Luego tenemos la mano del que obedece y del que manda, digámoslo así, a grandes rasgos, del que obedece separando las extremidades de la víctima y del que manda separárselas. Del desalmado, digámoslo así en el sentido del agresor, que puede ser cualquiera por supuesto, y la del sádico que efectúa determinados actos.
Es que normalmente el sadismo mayor su agresividad se centra en la producción de determinadas lesiones a fin de obtener la satisfacción sensual. Ya sabemos que a través de las lesiones no podemos intuir que satisfacción o que grado de satisfacción sensual ha tenido determinadas personas, pero si tenemos que colaborar y sabemos que determinadas lesiones tienen un tinte que muy probablemente es sádico.
El sadismo mayor se manifiesta en la edad adulta, se empieza a manifestar en la edad adulta el sadismo, y luego aunque pueda haber excepciones por supuesto como se ha dicho anteriormente, y luego pasa a formas de sadismo mayor ya muy adentrado en los 40 años, muy adentrado, 40 o 50 años etc. Por eso si las dos personas de las que se tiene sospecha son mucho mas jóvenes, es por lo que creemos que por lo menos ha la impronta de 3, por lo menos, y es mas, yo diría que no necesariamente de 3, puede haber algo mas, puede haber incluso alguien más que estuviese presenciando el espectáculo por lo siguiente, y me refiero a lo siguiente, nos encontramos, y esto vamos a decir refiriéndonos a una de las víctimas, los pechos al aire, cortada la camiseta, anudada la camisa en la parte delantera, vamos. Hay una especie, como si fuera de puesta en escena, lógicamente con el fin de que sea vista, no sabemos ni en que contexto, ni en que entorno, pueden ser los mismos, lógicamente en el entorno mas cerrado de los propios autores, pero nosotros no podemos nunca saber, ni intuir ni sospechar si había alguien mas.
Todo lo demás, vale. ¿Pero eso? Ahí la has cagado. El sadismo y esa degeneración no es propia de "hombres maduros", ni de nadie normal. O, dicho de otro modo, puede ser propia de "cualquiera", medido en términos de edad.
Aquí lo que hay es el clásico crimen cometido por personajes de lo mas alto del "reino", que no saben ya como ejercer su poder contra el populacho, pasados de toda clase de drojas, emborrachados y con ganas de emociones fuertes, porque una vida de vicio al mas alto nivel, requiere de emociones más y más fuertes cada vez.
Ni por los narices se va a creer nadie que dos chorizos de poca monta, se preparan una sesión de torturas gratuitas, arrancamientos de pezones incluidos, violaciones anales y vaginales, palizas, etc...
Es que es verdad, Anglés y Ricart eran los subproducto típicos de la Ruta del Bakalao y del trapicheo de drojas en el Levante de los años 90. Para nada dan el perfil de gente que desarrolle un sadismo tal como el ejercido sobre estas 3 criaturas.
de Ricart no sé, pero Anglés no era un subproducto de nada. Era un auténtico hijo de ***** muy conocido por su zona y capaz de las peores cosas, incluso atar a una cama a una tía que estaba coladita por él (típica fulastre que le gustan los malotes) durante dos días, y dejar que se la amaran sus hermanos y algunos amigos. Y eso antes de de cumplir los 18.