http://www.elcorreodigital.com/vizcaya/prensa/20070513/guipuzcoa/adios-ladrillo_20070513.html
Adiós al ladrillo
La empresa ermuarra Kubik y la debarra IBM presentan un sistema que abarata la construcción de viviendas
Hoy en día parece un milagro hablar de bajar los precios de las viviendas y el tiempo que se tarda en construirlas, pero la empresa ermuarra, Kubik, y la Inmobiliaria debarra BM creen haber dado en el clavo. Ambas tratan de conseguir este imposible con la presentación de un material bastante desconocido en España, pero que es utilizado habitualmente en otros países como Alemania, aunque en realidad se ideara en América.
Hay una explicación de por qué este sistema no ha llegado antes aquí. «Había intereses para que no entrara». Y es que el padre de la idea, un jubilado de 60 años, quiso evitar que su invento sirviera para llenar los bolsillos de los especuladores. «Este nuevo sistema no permitirá que se inflen los precios de las viviendas y los promotores ganen más, porque ya se ha dado el caso y se ha impedido», explicaron desde Kubik.
La Inmobiliaria BM se encarga de la distribución del material, denominado SCAI, mientras que Kubik se encarga de publicitarlo.
Los responsables de ambas firmas están convencidos de haber dado con lo que califican como «una revolución en la construcción», ya que se consigue una vivienda más barata y construida en lo que se podría denominar un «tiempo record».
El nuevo sistema de construcción presentado optimizará, tanto el tiempo de ejecución, como los precios. Otra mejora que trae consigo es la eficiencia energética, de un 60% a un 70%.
Se gana en tiempo porque este material sustituye al ladrillo y al encofrado al mismo tiempo. «No hay que encofrar y retirar el encofrado porque los bloques que se colocan y que luego se rellenan de hormigón quedan en el mismo edificio», explican.
El montaje no precisa de grúas, por lo que el gasto también se minimiza en este apartado. Además, los encofradores no tienen que utilizar la fuerza, porque los bloques son poco pesados.
No hay improvisación
Otra ventaja es que desde el departamento de arquitectura se adaptan todos los proyectos a este sistema y a la hora de redactarlo se tiene en cuenta el número de piezas y sus dimensiones, «por lo que en la construcción no hay que cortar ningún ladrillo, ni improvisar nada a pie de obra. El trabajador únicamente tiene que colocar las piezas y realizar su trabajo según un plan establecido, con lo que se gana en tiempo», afirman los distribuidores exclusivos de este proyecto en la zona norte de la península.
Aseguran que la rentabilidad conseguida es alta, porque la gestión y la improvisación que impera hoy en día en las obras hace perder mucho dinero. «Con SCAI bloques de viviendas que se ejecutan en 3 años se construirán en un año», afirman.
Y una vivienda unifamiliar de dos pisos se construye en 4 meses (un mes de proyecto de arquitectura y 3 meses para la edificación).
Este sistema constructivo no sólo ahora en presupuesto de obra, sino también energía en el hogar. «El Estado, en la actualidad, busca un 40 o 45% de eficiencia energética y nosotros podemos llegar con SCAI y otro conjunto de materiales a un 85%», aclaran sus promotores, ya que trata de un aislante acústico, térmico, sísmico e ignífugo.
El material utilizado es el poliestireno (material plástico de alta densidad). No es prefabricado y una vez colocado se rellena con hormigón armado. Por encima se le da el acabado que uno quiera, con ladrillo, piedra, etc. El resultado es inmejorable. «De hecho, cuando se terminan las casas no se sabe si están hechos por el método tradicional o con este material».
Pero, aseguran, la calidad no es sólo exterior. «Son construcciones monobloque, compactas. Incluso se ha hecho la prueba, en Alemania, de zarandear la casa con una grúa y siguió intacta. La calidad del material está más que estudiada y certificada», certifican.