El divulgador científico Isaac Moreno: "¿Cambio climático? Esto ha ocurrido siempre y va a seguir ocurriendo, una o dos veces por siglo"
El ingeniero, geógrafo y presentador de TVE reivindica el papel de los técnicos para evitar las consecuencias de la DANA: "España tiene los mejores técnicos del mundo pero no la gente capacitada para decidir algo sensato"
Isaac Moreno Gallo grabando su programa en una vía romana en la Rioja. E.M.
Isaac Moreno Gallo no es de esos que va diciendo por ahí que lo de DANA de Valencia ya lo veía venir, porque eso "ya lo veían venir hasta los romanos". Ingeniero técnico de Obras Públicas y graduado en Geografía e Historia, ha trabajado para numerosas administraciones como experto en algo nunca tan de moda como ahora: las infraestructuras hidráulicas. Director científico y presentador de la serie documental de RTVE,
Ingeniería Romana, y autor de varios libros, ha revolucionado las redes tras la publicación en
su canal de YouTube del vídeo
Geografía de una inundación: la DANA de Valencia.
P. ¿Usted es de esos que van diciendo por ahí que aguantan los puentes romanos y se caen los nuevos?
R. También los romanos se han caído. En España sólo quedan 37, y en la vertiente mediterránea, ninguno. Quedan unos estribos en Martorell y unos pequeñitos en un pueblo que se llama Cerezo del Río, en Burgos, que es vertiente mediterránea de milagro. En 3.000 años los ha tirado todos la hidrodinámica de los ríos que vierten al Mediterráneo, que es brutal. Los que quedan son todos del siglo XVIII en adelante. La gente no conoce el clima histórico. Se piensa que esto es el jardín del Edén, pero la vertiente mediterránea ha sido terrible siempre.
P. Dice que hasta que llegamos nosotros, a ninguna civilización se le ocurriría poner una casa en la Albufera o en sus torrentes, ¿qué pasa, que los romanos eran más listos?
R. No tanto. Digamos que eran igual de listos, vamos a dejarlo así. Hace 2.000 años ni las poblaciones ni las vías de comunicación se pegaban a la Albufera, principalmente por cuestiones de salubridad, como la presencia de mosquitos. Los márgenes y las zonas húmedas son insanas. La Albufera se cierra por el sedimento de los barrancos que desembocan en ella. Y uno de los más importantes es el famoso del Poyo, que ha causado esta catástrofe. Históricamente, esos barrancos han traído una cantidad de materia sólida increíble, brutal, tanto como para convertir una bahía en la Albufera. Es decir, los torrentes han vencido la hidrodinámica marina. ¡Han vencido al mar! Hoy en día, con nuestros conocimientos geológicos, ya sabemos que no es buena idea situarse al lado de esos barrancos porque son terribles, y tienen muy mala leche.
P. ¿Y eso lo sabían los romanos cuando veían un cauce seco?
R. Tenían suficiente conocimiento empírico con un cauce seco, al igual que los agricultores. No es un cauce pequeño. Aunque lleve durante todo el año un hilillo, y en años no sea capaz de tener un caudal importante, la anchura y las huellas en sus orillas están delatando que es un cauce terrible, y que de vez en cuando tiene una riada tremenda que provoca toda esa erosión, y toda esa socavación en sus orillas, y que no es un cauce cualquiera. Los romanos también podían preguntar a los más viejos: 'Oiga, usted, ¿que ha conocido aquí?'. Hoy no hace falta eso, porque sabemos calcular una cuenca y el caudal recurrente que puede pasar por allí en 500 años. Nadie puede alegar ignorancia de lo ocurrido en los últimos siglos. Hay un gráfico de 1864 en el que un señor, desde la cabecera de un barranco, pinta toda la llanura de Valencia, con toda la vega inundada. ¡Un charco! ¡Pinta un charco! Una de las pinturas más fáciles que ha hecho nadie, y luego pone unas letritas de donde está cada pueblo, que se ve una torrecita. Hay crónicas del siglo XVIII, como las de un botánico llamado Cavanilles, un erudito muy famoso en aquella zona de Levante, que también habla de las riadas terribles que sufrieron en aquella época.
P. Entonces simplemente nos creímos que podíamos doblegar a la naturaleza.
R. Pues el ser humano es muy amplio. En parte, es un asunto de estupidez. Es decir, los terrenos llanos son atractivos para construir determinadas infraestructuras, como polígonos industriales, pero son terrenos inundables. Incluso los más viejos saben que aquello se ha inundado alguna vez. Esto se reduce, en buena medida, a una mala planificación territorial. Hay que tener mucho cuidado con el lugar en el que se decide construir.
P. Ha habido dos momentos de gran crecimiento urbanístico en la zona: uno en los años 60 y 70, y otro en los 90 hasta el 2010, como si dijéramos, vamos a construir un poco y, si en unos años no pasa nada, pues seguimos.
R. Es una prueba de la evolución humana en la zona. Hemos pasado de la época agrícola, cuando los pueblos eran pequeños y se iban asentando alrededor de sus cultivos, a la época industrial, y luego a la época de servicios del sol y playa, en la que la población se ha ido a la costa, mientras que la España interior está vacía y la costa, superpoblada. Aquello es un terreno delicioso para construir polígonos industriales y todo tipo de urbanizaciones, y eso es lo que ha ocurrido en el último siglo.
P. Con sus garajes subterráneos...
R. Es que estamos en una tesitura estulta. Si aquello se inunda, no se ponga usted allí y punto. Pero se han puesto allí y han puesto el modelo clásico de un centro comercial, con parking subterráneo. Y como las casas normalmente en aquella zona del Mediterráneo son bajitas, de planta baja y un piso, pues tienen muy pocas posibilidades de huir.
P. Pero antes de planificar se consulta...
R. A los técnicos, a los geógrafos, a los ingenieros, para eso está la planificación territorial. Pero luego hay que tomar decisiones políticas inteligentes, porque nada de lo dicho sirve si no existe esto último. ¿De acuerdo?P. Pero se consultó.R. Claro, pero si todos los mapas que consulto yo no son míos. Los mapas de riesgos de las inundaciones los he cogido de la Comunidad Valenciana, o sea, directamente de la de la Generalitat, que los tiene colgados, y están disponibles desde hace décadas. Ahí están los riesgos, y resulta que la zona inundable coincide con zonas habitadas hoy en día. Y es la misma zona que hace 300 años. "Inundable" quiere decir que se va a inundar recurrentemente. Entonces, cuidado con lo que se hace allí. La planificación del territorio no ha ayudado a paliar ninguna de las consecuencias gravísimas de una inundación de estas. Todo lo contrario, las ha agravado muchísimo más, y ahora tiene que intervenir la ingeniería. Hablando en términos médicos, la enfermedad ya está ahí. Ahora lo que hay que poner son medios paliativos, porque no se pusieron los preventivos.
P. ¿Y qué se puede hacer?
R. Crear embalses de retención en esos barrancos, reforestando todo lo que se pueda las cuencas para que las puntas de la avenida no sean tan grandes. Si el agua viene de forma más paulatina, no causará tantos daños. Las inundaciones seguirán ocurriendo, pero no es lo mismo que la altura máxima sea de medio metro, que no va a apiolar a nadie, a que sea de dos metros. Hay que hacer diques de laminación e incluso embalses de laminación en las zonas altas de estos barrancos. De hecho, creo que alguno ya estaba proyectado desde 2004 o algo así. Nunca se hizo, y seguramente habría que haber hecho ese y algunos más, pero ya sabes que los embalses no están de moda precisamente en las últimas décadas. Es lo que hay. España tiene los mejores técnicos del mundo en esta materia para ofrecer una solución, pero no existe la gente capacitada para decidir algo sensato. Vamos a ver, ¿aquí quién shishi gobierna? Tenemos un problema feo, pero no es técnico, es político. Existen confederaciones, autonomías, el Estado, y entre todos la casa sin barrer. Todo este cúmulo de estupideces ha causado esta situación, y los técnicos tienen la solución. Sólo hay que consultarlos, hacerles caso y las planificaciones bien hechas llevarlas adelante por ley, y obligar a todos al margen de la legislatura, que haya una especie de Constitución Hidrológica. O se toman en serio las catástrofes o las tenemos servidas. Eso es lo que hay.
P. ¿Y cree que habrá más por el cambio climático?
R. Esto es imprevisible. Punto. Pero puede ocurrir el año que viene de nuevo, o puede no ocurrir en 150 años. Lo que es previsible es que va a volver a ocurrir porque en los últimos 5.000 años ha ocurrido, más o menos de media, una vez o dos por siglo. Así es como se miden estos acontecimientos. No con la memoria de las personas, que luego entrevistan a la gente que dice: 'Yo no lo recuerdo esto nunca'. Pero es que usted es muy joven aunque tenga 80 años; usted no tiene por qué recordar nada. Estas cosas se estudian de otra manera, no entrevistando a la gente.
P. Aparte de Valencia, en el mapa de España, ¿hay algún otro sitio en el que debamos fijarnos?
R. Las gotas frías son fenómenos frecuentes y, cuando tienes montañas cerca de la costa, la orografía acompaña para que las descargas sean muy rápidas, la punta de la crecida sea rápida, y que de manera súbita vaya toda el agua a la costa porque tienes laderas que van con mucha pendiente. Todo el Levante, y todo el Mediterráneo hasta Grecia tiene estas características.