Uritorco
The White Revolution is the only solution.
VOLUMEN 1: APARICION DEL ‘YO’ Y ALEJAMIENTO DE ‘EL’.
VOLUMEN 2: HITLER Y LA GRAN GUERRA.
VOLUMEN 3: MISION EN LOS tras*HIMALAYAS.
VOLUMEN IV. FIN DE LAS MEMORIAS.
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La vida de los hombres de esta Era lamentable es normalmente una repitición de los mismos actos vulgares y escatológicos que la Naturaleza nos impone: comer, reproducirse y defecar. Y estos son sus actos más significativos, porque los demás, el trabajo, sus aspiraciones y sus diversiones, su interior y sus deseos son de una ruindad tal que no merecen siquiera ser tenidos en cuenta. Hay, por supuesto, los hombres con una vida ‘importante’ en este mundo, son los más piratas, los más usureros, los que han destacado en su miseria jovenlandesal, los triunfadores en la olimpiada de la sarama, esos que salen en letras grandes en la prensa burguesa y capitalista, los grandes hombres del triunfo material, la élite del Mundo Oscuro, reflejo de toda la ruindad del mundo de Los Protocolos de Sión.
Para los que nacimos en este momento lamentable de la Humanidad la admiración por un Gran Hombre es algo muy raro de poder sentir, es una oportunidad que pocas veces podemos disfrutar. No pude conocer a la mayoría de los grandes hombres, ni los políticos ni los artistas, ni los genios… no pude hablar con Pio Baroja o Unamuno, ni luchar con Hitler o Codreanu, ni esperar ansiosamente la próxima obra de Wagner, Richard Strauss o de Papini. No llegué a tiempo. A cambio he podido conocer la miseria jovenlandesal de los actuales Premios Nobel y demás cortesanas del establishment, rastreros y vulgares hasta el infinito, he podido reirme con la sarama de un Tapies y admirar la pleitesía de todos hacia los monigotes de Miró, he podido conocer a las ratas usureras y a los cantantes de moda atiborrados de droja, alcohol y tatuajes, conocer a corruptos y degradados politicastros y a mentirosos profesionales con cargos de presidente.
Por ello cuando, por suerte del destino, he podido aun conocer a un Gran Hombre, me he considerado muy afortunado. Conocer a Skorzeny, Degrelle, Winifred Wagner o Barbie, poder conocer a Arno Breker o Juan de Avalos, la familia de Hess o Hans Rudel, unas docenas de grandes hombres, de los que no sólo llevaron una gran vida de héroe, sino que fueron personas de una valía espiritual profunda y sincera. Poco a poco han ido muriendo, y no son sustituidos por casi nadie en una época estéril. Sólo he conocido unos poquisimos grandes hombres de entre las nueva generaciones. Personas de verdad, llenas de vida espiritual, de sensibilidad de fuerza y lucha, de austeridad, de sacrificio, y valientes para enfrentarse al Sistema, pero son tan pocos…. No diré sus nombres pues aun viven (para un Gran Hombre la alabanza no es un mérito sino una molestia), pero son tan pocos que me sobran dedos en una mano.
Por eso hacía años que esperabamos las Memorias de uno de los Grandes Hombres que aun nos quedan, Don Miguel Serrano. Una gran persona no se distingue por "lo político", ni sólo por los cargos o actuaciones, sino por esa vida intensa, vivida con estilo y lucha, dura y sacrificada, sin motivaciones de éxito o cobro, sino por un gran Ideal. Quien cobra en dinero o éxito por sus obras ya tiene el premio que merece, sólo quien actua por valores íntimos merece el premio del reconocimiento. Pocos luchan 10 años seguidos por sus ideas, muy pocos luchan 30 años, y sólo los grandes hombres luchan una vida entera. Lo he visto demasiadas veces, como los más agresivos y radicales dejaban el sacrificio y la entrega cuando los años pasaban para acabar llevando una vida placentera y burguesa. Pero además no es la lucha sólo lo que da la grandeza, es preciso además que vaya unida a la Etica y el Arte, la Sensibilidad.
¿Quien de los hombres de este mundo mercenario actual se puede igualar con aquel Fredich Kuhfuss que a los 80 años gastaba su pensión de retirado en editar hojas de propaganda por sus ideales y repartirlas personalmente, medio cojo, por las calles de Barcelona, tras 60 años de lucha continuada desde las SA a CEDADE? Murió sólo y pobre en un hospital de caridad…. Pero que riqueza había acomulado!, que riqueza nos dejó con su ejemplo. Miguel Serrano nace en 1917, de forma que pudo vivir toda la Gran Tragedia, nace en Chile, es chileno hasta la médula, su vida es una vida intensa, llena de una vitalidad y un sentimiento personal, pero a la vez inmersa en hechos trascendentes, contactos con personas y acontecimientos únicos, y todo dentro de esa concepción trascendente de la que Don Miguel ha sido el primer propagador.
VOLUMEN 2: HITLER Y LA GRAN GUERRA
Un ser humano nace pero no es un ser aislado, no en el sentido natural que tenemos nosotros, está la herencia, la estirpe, la casa familiar, el entorno de la familia. Y con ello el amor a la tierra, a Chile, a sus tradiciones y sus gentes, a los detalles de su tierra. Entonces no era aun ‘nacista’ (como se dice en Chile), pero ese amor a la tierra ya lo predecía. Serrano recuerda especialmente a Nicolás Palacios, con su libro “Raza Chilena”, un auténtico monumeto a la estirpe chilena, a su origen y a su aristocracia de la sangre nórdica.
Inicia su ‘yo’, su propia vida, conoce como compañeros de estudios a muchos de los grandes intelectuales de los años 20 y 30 chilenos. Es compañero y amigo de Hector Barreto, o de Huidobro, poetas, escultores, literatos, toda una generación de gentes interesante. Serrano forma parte de ese conjunto de literatos y poetas que hay en todos los paises durante los años 30, que buscaban salidas e ideales, contra el mercantilismo y el materialismo. Entonces empieza a descubrir hechos que otros no se atreven a decir en público. Empieza a ver que los intelectuales que se plegan al marxismo y a la masonería reciben todo tipo de ayudas, homenajes y premios, sea cual sea su valía, mientras que los rebeldes y autónomos no tienen soporte alguno.
Esa contradicción le confunde: el propio sistema ayuda a los que le critican si lo hacen con el marxismo por delante. Neruda es el ejemplo máximo… estalinista obediente, jamás criticará ‘al Partido’, recibe todo el honor y medios del propio sistema capitalista al que critica de palabra. Pero Serrano aun tiene que vivir el caso de Hector Barreto, que como García Lorca, muere en enfrentamiento con ‘fascistas’. El amigo Barreto, como nuestro lamentable Lorca, muere en ese conjunto de luchas que tienen fascistas y comunistas. Como mueren también Muñoz Seca o Victor Pradera por el ‘otro lado’. Un conjunto de artistas sensibles e idealistas víctimas de un combate cósmico del Destino.
El dolor por estas muertes es la que debe animarnos a todos. Muertes inútiles y no deseadas por nuestro arquetipo. Ningún NS debe de alegrarse por la fin de Lorca o Miguel Hernandez, pues nuestra lucha es por la poesía. No podemos hacer como los marxistas que sólo lloran ‘sus’ poetas y condenan e insultan, desprecian y marginan a los poetas que no se plegaron a sus mandatos. Esta será una norma en Don Miguel Serrano, será siempre amigo de los sensibles y buenas gentes, sean de las ideas que sean. Tendrá amigos de todos los colores, judíos incluidos, nunca confundirá la guerra con las personas, la lucha contra el Enemigo con el aprecio por los enemigos que lo merezcan. Esta debe ser nuestra norma también.
En esos años descubre la miseria del marxismo, su materialismo y sus relaciones con las fuerzas ocultas del propio capitalismo…. Aun no es consciente del nacismo ni del tema judío y la masonería pero ya intuye que algo extraño trabaja para Neruda y sus acólitos desde el propio Capital. Y entonces vendrá toda su relación con el ‘nacismo chileno’, sin duda el más original y radical de todos los de sudamérica. Poco conocido en España, el nacismo chileno tiene un desarrollo muy importante, con gran presencia en la calle y en la política, gracias a la labor de Jorge Gonzalez von Marees y el carácter serio y disciplinado de los chilenos, que forman un ‘nacismo’ criollo de corte estético casi alemán. Von Marées intenta lo mismo que Hitler en Munich, un golpe político contra un Estado en descomposición dirigido por un corrupto, Alessandri, con la ayuda de un militar, el General Ibañez, similar a Ludendorf en Alemania.
El golpe fracasa (como en Alemania, por el abandono de los militares), pero en Chile esto será el motivo de algo terrible: todos los nacistas detenidos son asesinados en la Torre del Seguro Obrero por la policía con la aceptación de Alessandri. Todo Chile queda consternado por la magnitud del crimen. Serrano será ya siempre nacista. Y lo será siempre de forma total y fiel. Cosa que es más valiosa cuando en Chile la traición va a ser absoluta: Jorge Gonzalez , ya no merece lo de von Marées, traicionará la memoria de sus camaradas asesinados, pactará con Alessandri su malo, se apuntará al partido demócrata y acabará despreciado por todos en una vida perversos.
Serrano será el ejemplo de la fidelidad a los caidos, al rechazar publicamente y privadamente las ofertas de Alessandri de ‘olvido y amistad’ con su mano manchada en sangre. Se inicia la Gran Guerra, Serrano luchará por el Eje con todas sus fuerzas. Editará una revista "La Nueva Edad" en favor del Eje, hablará y recorrerá un Chile pro alemán en su base popular. Y descubrirá definitivamente la acción del judaismno y la masonería (esa forma de ser judío honorario, como dirá Serrano). Su entrega a la lucha es total, y eso lo va a pagar carísimo. Tras la derrota militar su nombre está en las famosas Listas Negras de USA, y eso le quita todo medio de vida, todo trabajo y relación comercial posible. Ha perdido su dinero apoyando al Eje, tiene tres hijos, pues se casa en 1942, y pasa momentos muy duros.
Empieza en Miguel Serrano el conocimiento de lo Esotérico, de la Lucha Interna. El fracaso de la lucha Externa es sólo una parte del Combate Cósmico, hay que seguir la lucha interna, la Guerra Espiritual, hay que merecer estar en el Ultimo Batallón, en los que ganan perdiendo, con su sacrificio y lucha. En 1947 logra ser el único civil en el viaje militar chileno a la Antártida, y allí se afianza su esoterismo absoluto, del que será ya siempre un gran maestro. Poco a poco logrará, con amigos sinceros, y con una valía personal, ir trabajando, viajando, conocerá a grandes hombres como Hermann Hesse y será Embajador en varios paises, sus relaciones y actuaciones son de lo más interesante.
El segundo Volumen sólo inicia la exposición de algunas de estas relaciones con Nehru, con Ghandi, con Hesse, etc… pero queda el volumen tercero para acabar de desarrollarlas. Y en una vida tan rica, no puede faltar la poesía, lo sensible, siempre presente. Siempre en contacto con artistas y poetas. Una vida con dolor, dolor por la derrota externa del nazismo, compensada por su lucha interna victoriosa. Dolor por la fin de su esposa, compensada con sus hijos. Y por fin dolor porque cuando encuentra una mujer excepcional, Irene, con una sensibilidad especial, ELLA muere en corto tiempo. Dolor y Lucha.
Un libro sensible y aleccionador de una vida intensa y valiosa. Dos volumenes con dedicatoria especial a una camarada española, Sabela, que fue miembro activo de CEDADE, una persona de sensibilidad extraordinaria, y ahora es una ayuda inestimable en Chile para Serrano. No es un libro para cualquiera, no es para una lectura ‘política’, no es para leer como entretenimiento ni para leer como lectura política. Es una obra para pensar y sentir, para gente sensible y apasionada, para entender más el Esoterismo, para contactar con un mundo que se acabó pero del que aun quedan chispas vivientes, un mundo que se hundió, y no hablo sólo de lo político, se hundió también el arte y la sensibilidad de aquella época, ahora vivimos en ese entorno de miseria espiritual que era lógico de esperar gobernando Sión.
VOLUMEN 3: MISION EN LOS tras*HIMALAYAS.
El tercer volumen de las Memorias de Don Miguel Serrano es un reflejo de otro mundo y otros seres, que parecen no ser ‘posibles’ al compararlos con los golems, los robots vulgares, mercantiles y mediatizados actuales. Este libro es "nuestro ideal de vida", no son sólo unas memorias sino un ejemplo de cómo vivir, no son una continuación de acontecimientos sino un relato de sentimientos y estilos. Es pues una oportunidad para sentir esa esencia de la que tanto hablamos y que tan difícil es encontrar en estado puro.
En este libro no vereis ‘política’, ni programas, ni violencias, ni denuncias o críticas continuas contra el Sistema, no, este libro CONSTRUYE, no critica sino muestra. Como ‘Almas Ardiendo’ de Degrelle, por ejemplo, son textos para descubrir el otro lado del mundo, la ‘cara oculta’ de una Humanidad que no podemos imaginar al analizar el humanoide actual. Claro que también describe acontecimientos, hechos muy interesantes, pero eso es secundario frente a las personas descritas y su interior, su relación anímica con el autor.
El general Ibañez, arquetipo del militar, de ese militar que siempre ha sido fatal para nuestras ideas, populista, un tanto brutal y sin gran sensibilidad, pero tampoco perversos como el usurero, se presenta a las elecciones presidenciales. Serrano le ayuda en su campaña contra la derecha usuraria, y al ganar las elecciones le pide el destino en la India. La voluntad de cumplir una Misión, en la India, lleva a Serrano a conseguir la Delegación de Chile en la India, es su gran Viaje, no un ‘viaje’ cualquiera, no es turismo, es un Encuentro.
Y allí empieza la parte mágica del libro, el encuentro entre la India y nuestro sentimiento, el de Serrano que debería ser el de todos, esa forma distinta de entender la ‘diplomacia’, ese sentir la India y no sólo la venta de salitre o cobre chileno. Saber acercarse a la esencia del misterio de la India, de sus castas, de su Kailas, el monte sagrado del Himalaya, “espejo del Melimayu chileno”, ese Sur chileno mágico del que aun se ha de escribir en el próximo libro de las Memorias.
Es fascinante el sútil diálogo que va adentrando a Serrano en sus relaciones con Nehru, con su hija Indira Ghandi, con el hijo de ésta, Rajiv, con esos personajes de otro mundo, el Dalai Lama, los místicos indues, las castas, desde el chofer a los Maharajas, sin olvidar a esa pobre Shandala atropellada por el coche de Serrano, todos son personajes de un mundo imposible ya, personajes que no pueden ser aceptados por los Robots mercantiles actuales, son Personas.
Hay detalles emocionantes, como ese en el que Nehru personalmente se lia a golpes con el pueblo por un disturbio, y la gente obedece y agradece la corrección, como dice Serrano eso es democracia, eso es ser ‘popular’, saber castigar o corregir contando con la comprensión del pueblo corregido. E Indira, que personaje, que gran mujer, trágica en su destino, firme en su ideal, sensible, tan odiada por el arquetipo del Enemigo del Mundo.
También esta la relación con el Dalai Lama y con Hanna Reitsch, ambos con su especial situación, víctimas de la brutal presión social. El Lama tuvo que ceder para seguir siendo ‘respetado’ y Hanna para poder seguir pilotando aviones, su pasión. Y los cuadros, los dibujos, del pintor chileno Julio Escámez, magníficos, comunista él, pero que importa eso!, esos odios insanos sólo son para los vulgares antifascistas (y a los de derechass cerriles, que también los hay), nosotros nunca podemos pensar a las personas en base a su carnet sino a su Ser, a su Calidad. Magnífico su dibujo de la amiga Sabela, y tantos de Serrano y la India.
Y tantos detalles, pero por encima de ellos el sentimiento global de que los nacionalsocialistas son ‘otra cosa’, tienen otra forma de ser y sentir. El secreto del NS está en sus hombres, no en sus "ideas", sino en su calidad interior. Hitlerismo antes que Nacionalsocialismo, o sea, el Hombre antes que la mera idea. Como me decía un gran camarada: Sin Hitler y sin Wagner no tendría sentido nada de nuestra Revolución... porque no somos platónicos, no creemos en Ideas sino en Sentimientos, creemos en el Hombre, no en la mera Lógica.
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