stop llorones
Himbersor
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Todas las encuestas van dando una intención de voto a Podemos que baja sin parar. Ya son el 4º partido a mucha distancia de los otros 3 para todos los sondeos.
Mientras tanto Ciudadanos va alcanzando la primera o segunda posición, adelantando al PSOE.
Pablo Iglesias vislumbra el fin de sus días como candidato a Presidente del Gobierno, y está sacando toda la artillería pesada para incendiar España y sembrar el caos.
Hay que entender la psicología del personaje: Pablo Iglesias no es un estadista. No es un tecnócrata ni un político japonés o coreano. No es un hombre que quiera llegar a la presidencia de España para que el país, en vez de crecer a un 3% anual, debido a su astucia y planificación, consiga crecer un 3,2% anual. O que el paro baje en 100.000 personas adicionales anualmente. No es un hombre gris, serio, que quiera pasar desapercibido y mejorar el país todo lo posible.
No, es un aspirante a cacique.
PIT ve la presidencia del gobierno como "asaltar el cielo".
PIT rechazó entrar en un gobierno con el PSOE y Ciudadanos, entregándole la presidencia a Rajoy debido a su avaricia y arrogancia.
PIT es un sádico del cual se han filtrado conversaciones de Whatsapp en las que hablaba de azotar hasta sangrar a una presentadora de televisión.
PIT es un hombre que se ha estado acostando con las número dos de su partido: Tania Sánchez (cuando se separaron desapareció de Podemos) e Irene Montero, que de la nada llego a ser la número del partido, a base de braguetazos.
Es un tío que vive de la agitación. Se ha financiado con dinero iraní y venezolano, y vive de SEMBRAR EL CAOS.
Para él cualquier estratagema es válida para llegar al poder.
No es un estadista que pase las noches en vela leyendo tratados de economía, buscando recovecos en el sistema para mejorarlo. No lee sobre el milagro económico de los tigres asiáticos, o sobre el impulso a las economías nórdicas de las reformas pro-mercado de los '90 dentro de sus sistemas social-demócrata. Eso para PIT es un rollazo. PIT es un profesor de ciencias políticas que se pasa las noches en vela leyendo sobre el asalto al Palacio de Invierno, sobre la Guerra Civil española, las checas, Durruti y Antonio Gramsci.
Es un radical, un agitador.
Le rezuma la berenjena que arda España mientras eso le beneficie a su partido.
Porque es un orate y un hijo de la gran fruta.
Está sacando toda la artillería para arrasar un país que crece al 3% anual creando 500.000 empleos. Un país en el que se está subiendo el SMI a razón de 50€ anuales, y cuyo Presidente del Gobierno se ha comprometido a que llegue a los 990€ (en 12 pagas) de aquí a 2 años. Un aumento de 120€ en dos años.
Los funcionarios van a ver sus salarios aumentados un 10% en 3 años.
Todo esto con un 16,5% de paro todavía, pero que va bajando a medio millón anual.
Pero PIT es un orate. ¿De qué va a vivir si lo echan de su propio partido? Es una persona tóxica y odiada. El líder político peor valorado de España. Están esperando a las próximas elecciones para darle una puñalada y sustituirlo por una cara amable, tipo Errejón o algún desconocido.
Que arda España si hace falta. Él no se quiere quedar sin su mamandurria. Lleva toda la vida leyendo sobre estrategias para sembrar el caos y participando en manifestaciones, agitaciones y escraches.
Tu fin está próximo, orate hijo de la gran fruta.
Mientras tanto Ciudadanos va alcanzando la primera o segunda posición, adelantando al PSOE.
Pablo Iglesias vislumbra el fin de sus días como candidato a Presidente del Gobierno, y está sacando toda la artillería pesada para incendiar España y sembrar el caos.
Hay que entender la psicología del personaje: Pablo Iglesias no es un estadista. No es un tecnócrata ni un político japonés o coreano. No es un hombre que quiera llegar a la presidencia de España para que el país, en vez de crecer a un 3% anual, debido a su astucia y planificación, consiga crecer un 3,2% anual. O que el paro baje en 100.000 personas adicionales anualmente. No es un hombre gris, serio, que quiera pasar desapercibido y mejorar el país todo lo posible.
No, es un aspirante a cacique.
PIT ve la presidencia del gobierno como "asaltar el cielo".
PIT rechazó entrar en un gobierno con el PSOE y Ciudadanos, entregándole la presidencia a Rajoy debido a su avaricia y arrogancia.
PIT es un sádico del cual se han filtrado conversaciones de Whatsapp en las que hablaba de azotar hasta sangrar a una presentadora de televisión.
PIT es un hombre que se ha estado acostando con las número dos de su partido: Tania Sánchez (cuando se separaron desapareció de Podemos) e Irene Montero, que de la nada llego a ser la número del partido, a base de braguetazos.
Es un tío que vive de la agitación. Se ha financiado con dinero iraní y venezolano, y vive de SEMBRAR EL CAOS.
Para él cualquier estratagema es válida para llegar al poder.
No es un estadista que pase las noches en vela leyendo tratados de economía, buscando recovecos en el sistema para mejorarlo. No lee sobre el milagro económico de los tigres asiáticos, o sobre el impulso a las economías nórdicas de las reformas pro-mercado de los '90 dentro de sus sistemas social-demócrata. Eso para PIT es un rollazo. PIT es un profesor de ciencias políticas que se pasa las noches en vela leyendo sobre el asalto al Palacio de Invierno, sobre la Guerra Civil española, las checas, Durruti y Antonio Gramsci.
Es un radical, un agitador.
Le rezuma la berenjena que arda España mientras eso le beneficie a su partido.
Porque es un orate y un hijo de la gran fruta.
Está sacando toda la artillería para arrasar un país que crece al 3% anual creando 500.000 empleos. Un país en el que se está subiendo el SMI a razón de 50€ anuales, y cuyo Presidente del Gobierno se ha comprometido a que llegue a los 990€ (en 12 pagas) de aquí a 2 años. Un aumento de 120€ en dos años.
Los funcionarios van a ver sus salarios aumentados un 10% en 3 años.
Todo esto con un 16,5% de paro todavía, pero que va bajando a medio millón anual.
Pero PIT es un orate. ¿De qué va a vivir si lo echan de su propio partido? Es una persona tóxica y odiada. El líder político peor valorado de España. Están esperando a las próximas elecciones para darle una puñalada y sustituirlo por una cara amable, tipo Errejón o algún desconocido.
Que arda España si hace falta. Él no se quiere quedar sin su mamandurria. Lleva toda la vida leyendo sobre estrategias para sembrar el caos y participando en manifestaciones, agitaciones y escraches.
Tu fin está próximo, orate hijo de la gran fruta.
