Caos inmobiliario en Bildu: alquileres sin contratos y sedes sin declarar
El Tribunal de Cuentas detecta irregularidades en el patrimonio de Sortu y Eusko Alkartasuna
El partido declara 22 sedes y tiene ocupados otros 23 locales sin contraprestación alguna
22/10/2023
Caos en el patrimonio inmobiliario de EH Bildu. El Tribunal de Cuentas ha detectado en un informe múltiples irregularidades en la gestión que el partido ha llevado a cabo durante los ejercicios 2018 y 2019. En el mismo se apuntan anomalías tanto en la federación como en dos de los partidos que la integran —Eusko Alkartasuna (EA) y Sortu— denunciando la existencia de sedes sin declarar, alquileres sin contrato, movimientos en las cuentas que no cuadran y anomalías contables en las sociedades mercantiles tenedoras de los inmuebles.
Tras el análisis de las cuentas, el Tribunal concluye, de hecho, que las cuentas anuales de los ejercicios 2018 y 2019 "no presentan fielmente la situación financiera y patrimonial de la formación".
La formación política en la que se han detectado más irregularidades es Eusko Alkartasuna. En el informe se señala, pro ejemplo, que ha recaudado 53.679 euros entre 2018 y 2019 por ceder inmuebles que no son de su propiedad a terceros en Vitoria y las localidades vizcaínas de Basauri y Lemona sin que existan contratos. Estos ingresos, "deberían corresponder a la sociedad propietaria, al no constar la existencia de acuerdos en otro sentido que permitan la realización de negocios jurídicos con terceros sobre dichos inmuebles", apunta el Tribunal.
Siguiendo con esta línea, el Tribunal destaca que EA ha declarado tener 22 inmuebles de su propiedad, pero señala que del análisis de la relación de sedes facilitada "se deduce la existencia de otras 23 ocupadas sin contrapretación" por la formación política. De este total, la Fundación del partido, Elkartu, es propietaria de 16 y las restantes pertenecen a diversas entidades, entre las que además de sociedades hay agrupaciones gastronómicas y otras asociaciones.
El Tribunal de Cuentas señala asimismo que "el partido no ha registrado en el activo no corriente el derecho de uso de los inmuebles que no son de su propiedad, de los que disfruta de forma gratuita". Además, también se hace hincapié en la Fundación Elkartu, propiedad del partido vasco desde el 2000, que a cierre de 2019 tenía un patrimonio neto negativo de 563.064 euros, como consecuencias de las pérdidas acumuladas de varios años que surgen por un desequilibrio entre ingresos y gastos. Ante esto, EH Bildu debería haber tomado cartas en el asunto para sanear la situación. De hecho, según expone el Tribunal de Cuentas, "el partido debería haber efectuado una oportuna corrección valorativa por la totalidad de la inversión".
Diversas anomalías
Y no son las únicas anomalías. EA participa en el capital social de cuatro sociedades mercantiles propietarias de seis inmuebles en los que se ubican sedes del partido y, tras el análisis de los porcentajes de participación y de los estados contables de las sociedades al cierre de los ejercicios 2018 y 2019, "se deduce que debería minorarse el valor de la inversión en estas sociedades por importes respectivos de 472.347 y 473.224 euros". Además, EA no ha diferenciado el valor de los terrenos y de la construcción de ocho sedes y una plaza de garaje, lo que deriva en una sobrevaloración de la amortización. Ya en 2017, el Tribunal de Cuentas alertó que era necesario un código que identificara cada uno de los bienes y que, además, registrara donde estaba.
Respecto a Sortu, "del análisis del inventario de la formación se ha observado que no recoge el valor de los terrenos". Como ya se indicó en los informes de fiscalización de ejercicios anteriores, éste debería reflejar cada elemento de forma individualizada, en lugar agrupados "indebidamente" bienes adquiridos a través de una misma factura de compra. Sortu ha alegado que "subsanará en el 2022 el error de contabilización y de inventario".
En las cuentas de Bildu, también destacan inversiones inmobiliarias de EA por un inmueble comprado en Getxo, por un importe de 280.000 euros en lugar de los 298.000 euros que aparecen en la contabilidad. El Tribunal también destaca el apartado de "inmovilizado material, intangible e inversiones inmobiliarias", pues los movimientos de dicho inmovilizado no se corresponden con los registrados contablemente. Pero no solo se han detectado irregularidades en el patrimonio. EH Bildu registró unos ingresos ordinarios de 23,1 millones entre 2018 y 2019; con ingresos públicos fueron de casi seis millones de euros y el Tribunal de Cuentas ha detectado varias irregularidades al respecto. En las localidades con más de 20.000 habitantes hubo subvenciones—valoradas en 113.127 euros entre ambos años— de grupos de los ayuntamientos de Portugalete, Barakaldo y Bilbao que no fueron registradas y que, por lo tanto, no están incluidas en los ingresos.
Desde el partido alegan que "el registro contable de los ingresos se realiza en el ejercicio en el que se cobran". En el caso de Portugalete y Barakaldo las cantidades están contabilizadas en 2019; sin embargo, Bilbao está pendiente de recibir los ingresos y por eso, todavía, no se habrían registrado. EH Bildu añade que "la deducción del Tribunal de infavaloración de los ingresos es errónea". No obstante, y siguiendo el Plan de Contabilidad Adaptado a las Formaciones Políticas y a la Ley Orgánica (PCAFP), "los ingresos deben contabilizarse en función del momento en el que los mismos tengan lugar, con independencia del momento de su cobro".