pero hombre, que solo son 20 eurillos, lo que vienen siendo 3 cafes con croissant en una cafeteria de barrio y una pepacola, y lo bien que se lee en papel y no en una pantalla de ordenador donde te dejas los ojos.
y que diablos, que el tio se merece que el libro se lo compren, que para algo se ha tomado la molestia de escribirlo