Dejo claro, para empezar, que yo en el pasado
he donado dinero a Wikileaks.
Dicho esto, me gustaría recalcar que el sentido común debería hacernos dudar a todos de Wikileaks en estos momentos.
Hace tiempo casi todos estábamos encantados con la idea de tener al fin una fuente de información independiente y libre. Wikileaks pretende presentar los documentos tal como son, en formato crudo y puro, pero precisamente esa crudeza los hace inaccesibles para el común de los mortales. Sucede como en economía: la realidad está escondida debajo de una espesa capa de tecnicismos y lenguaje incomprensible para el público en general, por lo que se requiere del "filtro" de supuestos analistas cuya misión es traducir esa información. Esa "pureza" que parece una ventaja, se convierte de repente en una desventaja que nos deja a merced de posibles manipulaciones.
Esa supuesta independecia y neutralidad de Wikileaks hizo que todos tuviéramos la esperanza de que algo rellenito saldría a la luz, pero la realidad es que todos los hechos "demostrados" no son más que puras anécdotas. Los documentos sobre Irak y Afganistán son en su mayoría reportes sobre acciones de guerra que de vez en cuando sacan a la luz algún "caso aislado" de tortura, muerte de civiles, periodistas.... Pero al fin y al cabo,
nada que no ocurra en cualquier guerra.
No hay ni un solo documento sobre el tráfico de heroína en Afganistán. Como bien sabemos, la CIA es una organización que desarrolla actividades secretas. Parte de sus ingresos están recogidos en los presupuestos del estado, y con esos ingresos se financian las operaciones NO secretas. Todo viene recogido en los presupuestos que se pueden consultar en
U.S. Department of State.
Para las operaciones que no pueden dejar rastro, la CIA se financia a través de actividades
ilegales ya que cualquier financiación legal
deja rastro y está documentada.
Pues bien, la razón para entrar en Afganistán era la heroína, necesaria para financiar la creciente demanda de dinero oscuro por parte de la CIA ya que la agenda imperialista de EEUU ha pegado un acelerón.... Y seguirá acelerando.
Dicho esto,
¿Cómo es posible que no haya ni un sólo documento sobre el trabajo en los campos de papaver somniferum (amapola) en Afganistán?. La única prueba que tenemos son las fotos satélite que demuestran que la
cantidad de terreno destinada al cultivo de amapola en el país se ha multiplicado por 5 desde la entrada de los americanos. Pero de eso no hay rastro en Wikileaks.
Además, un estudio pormenorizado de los documentos evidencia hechos muy preocupantes.
Las víctimas contabilizadas por Wikileaks coinciden de forma increíblemente precisa con las cifras oficiales. No hay un sólo documento que evidencie los tejemanejes y negocios que está haciendo EEUU con los recursos energéticos de Irak (razón por la que se invadió el país). Sólo anécdotas y más anécdotas.
Estas últimas "revelaciones" son más inquietantes aún. Presentadas por medios más que proclives a la desinformación como El País, nos encontramos con supuestos "noticiones" que no son más que tonterías. Las fiestas secretas de Berlusconi, supuestas presiones entre diplomáticos.... Cosas que todo el mundo sabe y que, en realidad, no aportan nada nuevo.
Y lo más preocupante:
salen repetinamente a la luz, entre esos "noticiones", informaciones que nos presentan a Irán y a Corea del Norte como enemigos de la paz mundial. Querido defensor de Wikileaks, ¿No te parece raro? Justo los países que figuran en el primer puesto de la agenda de EEUU. En cambio, no hay demasiado sobre Rusia, vaya. Sólo anécdotas. Pero es que
Rusia no es la prioridad ahora mismo, ya habrá tiempo después de Irán.
Con esto quiero decir que todo esto
pinta muy mal. Obviamente habrá que hacer un análisis detallado de todos los documentos, todos aquí hablamos de lo que
creemos pero la realidad es que
no podemos estar seguros de nada, al menos de momento.
Sólo nos queda el sentido común: y ahora mismo, este dicta que seamos cautos y críticos ante este nuevo "paladín de las libertades". Es más que probable que nos llevemos una
muy desagradable sorpresa.
Saludos