En biología, cuando una población crece exponencialmente demasiado para su entorno, los sujetos desarrollan conductas gayses, se frena la reproducción y crece la conflictividad del grupo, llegando al asesinato de miembros de la misma especie por conductas violentas no filiadas.
Hay algún documental en la India sobre los parias que no tienen acceso a mujeres, por ejemplo. Da auténtico miedo, pero en 100 o 500 años los estudios sobre esta etapa serán muy interesantes. Nos ha tocado vivir una regresión, en vez de una progresión. Y la regresión va a ir cada vez más rápido. No tardaremos en ver sucesos históricos que no han ocurrido nunca, como una declaración de guerra inesperada de alguna potencia tipo Rusia a algún país europeo por el motivo más simple. Y cuando eso pase, veremos cosas raras: países jovenlandeses alineándose y mandando tropas para que cuando todo pase, se queden ya aquí y cambie todo lo que creemos que nunca iba a cambiar.
Ni los búnkeres ni los latunes nos van a salvar de esta década.