No es antinatural si el mercado esperaba paros mucho más altos y una cuarentena de 3 meses que al final Trump dice que será solo de 14 días. Lo que es antinatural es los ratios a los que cotizban y siguen cotizando algunas empresas estadounidenses. Antes de la crisis del coronabicho se podía decir que era una mezcla de euforia y de expectativas de crecimiento brutales, pero ahora no hay ninguna de las dos y ahí siguen. En Europa y Asia desarrollada es al revés, hay muchísimas empresas que a nivel contable cotizan a niveles irrisorios.
Tesla está a 545 dólares y creo que nadie puede decir que a día de hoy los valga. Una empresa normal del sector, con la contabilidad de Tesla y con las perspectivas de crecimiento a corto-medio plazo que tienen los automóviles durante las crisis, cotizaría a menos de 20 dólares. Renault, para citar otra del mismo sector, tiene el doble de ingresos y 8 veces el patrimonio neto de Tesla. Es una empresa objetivamente más grande que Tesla, pero Tesla capitaliza 90000 millones de dólares y Renault "solo" 5500 millones de euros. Una cotiza a precios de quiebra absoluta, la otra a precios que asumen crecimientos del 50% anual. Y quién dice Renault podría decir Nissan, Hyundai, Kia, incluso Daimler o BMW. No hay diferencia en tecnología ni en red de distribución ni en nada que justifiquen esas diferencias. Es dantesco a más no poder.
Ojo, he puesto automovilísticas para comparar manzanas con manzanas, pero podría decir lo mismo de otras empresas de moda estadounidenses que no tienen equivalentes en Europa y Asia. Todo el mundo que sepa un poco de contabilidad puede mirar varias empresas y después pueden decir si con las perspectivas que hay los precios de unas y otras son justificados o no, para bien o para mal.
Yo por suerte voy a largo plazo y lo que me interesa es cobrar dividendos, que aunque se acaben descontando de la cotización sé que es pasta real que viene de las empresas. Solo me tengo que preocupar por comprar barato y que la empresa no acabe quebrando ni diluyéndose hasta el infinito; pero reconozco que ver todo lo que he comprado las últimas semanas en verde absoluto, con la crisis que viene, no me deja buen sabor de boca...